Reporte: Activistas mexicanos sufren intento de hackeo

Denuncian intento de hackeo a activistas que han hecho campaña contra los refrescos y la comida chatarra en México

Activistas que han hecho campaña contra los refrescos y la comida chatarra en México fueron víctimas de un intento de hackeo, presuntamente por medio de software producido en Israel que ha sido vendido a varios gobiernos, denunció el sábado un grupo que se dedica a analizar las actividades en internet.

El Citizen Lab, con sede en la Facultad Munk de Asuntos Globales de la Universidad de Toronto, informó que el ataque con programas espía estuvo dirigido a Alejandro Calvillo y Luis Encarnación, activistas a favor de la salud pública, y al médico e investigador de salud pública Simón Barquera.

México aprobó un impuesto a los refrescos hace varios años y Calvillo ha hecho una campaña para que se coloquen advertencias sobre los niveles de azúcar en los alimentos procesados.

En el informe se involucra al software producido por el Grupo NSO de Israel. El spyware Pegasus brinda a los hackers la capacidad de escuchar conversaciones telefónicas a escondidas, recolectar mensajes, activar cámaras y acceder a una gran cantidad de datos personales registrados en los teléfonos celulares.

"La herramienta de vigilancia gubernamental de NSO pudo ser usada incorrectamente en aras de intereses comerciales especiales, y no para combatir la delincuencia o el terrorismo", se afirma en el informe.

El Grupo NSO subrayó el sábado que sus programas sólo fueron creados "para la investigación y prevención de actividades delictivas y de terrorismo", y puso en duda que hayan estado involucrados en este caso.

Calvillo dijo sospechar del gobierno mexicano o de la industria de refrescos y frituras.

"Si lo aplicó la industria, si lo aplicó el gobierno, no sabemos", señaló Calvillo, un destacado promotor de un impuesto especial por litro para los refrescos azucarados implementado en 2014.

Calvillo agregó que el intento de infiltración se hizo el año pasado a manera de mensaje de texto proveniente de un número desconocido, y contenía un enlace a un presunto reportaje noticioso. El activista explicó que se trató tanto de un intento de hackeo como de una amenaza: cuando el enlace fue activado, lo dirigió a una página de una casa funeraria.

México es uno de los países con mayores tasas de obesidad, diabetes y consumo de refrescos a nivel mundial.

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