El Color de las Gemas y Su Lenguaje

El Color de las Gemas y Su Lenguaje

Quién diga que no le gustan las piedras preciosas, ya sean rocas, minerales, vidrios o productos de origen natural, está mintiendo. Su brillo, rareza, perfección, cortes, pureza y cambios con la luz, simplemente nos hipnotizan. Y ni qué decir del valor económico o estatus que nos regalan, junto con su belleza.

Pero es su variedad de colores, lo que realmente nos fascina y determina en gran parte, su valor. Esto se debe a que hasta el siglo XIX, su principal proveedor era la enigmática India, ya que poseía los mejores yacimientos de todo tipo de piedras preciosas. Y no sólo eso, sino que marcaban el sistema de castas, base de su sociedad y que las representaban los diferentes colores de las piedras. Irónicamente, entre menos color tuvieran, era una casta más alta en esta división.

No solamente son muestra del gran talento de muchas marcas y orfebres, que las resaltan aún más, algunos piensan que tienen propiedades esotéricas y hasta medicinales. Independientemente de que estén engarzadas o en su estado natural, sus colores tienen diferentes significados, usos e interpretaciones:

Amarillo.- Representa la intelectualidad, el aprendizaje, la tenacidad, la inteligencia y el pensamiento lógico. Se relaciona con la alegría, la inspiración, el optimismo, la abundancia, la calidez y la inspiración. Atraen la felicidad, la prosperidad y ayudan a tomar buenas decisiones. Ayuda a personas con dislexia, el estomago, el hígado, los intestinos, la vejiga y el sistema endócrino. Algunas de las piedras con ese color son el ágata, el ámbar, el citrino, el cuarzo, la turmalina y el zafiro amarillo.

Azul.- Es el color de tranquilidad, la protección, la seguridad, la relajación, la confianza y al evocar el océano o el cielo, es el de lo fresco, lo transparente y lo puro. Tranquiliza la mente, fomenta el sueño, combate el dolor del alma y disminuye la presión arterial. Las piedras más comunes son la aguamarina, la tanzanita, el topacio, la turquesa y el zafiro. Se cree que purifican la energía y ofrece bienestar tanto al alma como al cuerpo.

Blanco.- Se relaciona con la pureza, la claridad, la trasparencia, la resurrección, el brillo, la luz, la tranquilidad y la unión. Se asocia con el proceso evolutivo, la ayuda y el bienestar. Las piedras de este color son el cristal de roca, el cuarzo, el diamante, el jade blanco, el ópalo, la perla y la piedra luna. También se usan para limpiar el aura y purificarla, así como para desbloquear los chacras y eliminar obstáculos. Son las que más se asocian con un alto estatus y poder económico.

Morado.- Por ser el resultado de mezclar el azul y el rojo, es el color del equilibrio. Está relacionado con la realeza, la espiritualidad, la transformación, la intuición y la meditación. Antiguamente, se creía que contrarrestaba los venenos. Es útil para controlar desórdenes mentales, el bazo, los huesos, la meningitis, los dolores de cabeza y las migrañas. Activa el perdón, la liberación, la protección y la compasión. Sus piedras son la alejandrita, la amatista, la fluorita y el topacio.

Naranja.- Simboliza el amanecer, el despertar de la conciencia, la paz mundial y fomenta la trasmisión de la energía, la vida, la prosperidad, la creatividad, el emprendimiento, la cordialidad y la bondad. Combate la depresión, la ansiedad y el cansancio, con sólo tenerla cerca. Las piedras más representativas son el ámbar, la calcita, el citrino, el cuarzo, el diamante y la malaquita.

Negro.- Es el origen y la combinación de todos los colores. Representa la protección, la noche, el miedo, la totalidad, la elegancia, el misterio, el esoterismo, la magia, el lujo, la introspección, la lujuria y los deseos ocultos. Evita que se acerquen las malas, energía y la negatividad. Sin embargo, hay quienes piensan que es el color del inframundo. Las piedras que lo reflejan son el ágata, el azabache, el diamante, la obsidiana y el ónix.

Plateado.- Es un color purificador, que estabiliza, armoniza y se relaciona con la luz y el dinero. También se asocia con la mujer, la ternura y la inteligencia. Ayuda al sistema respiratorio completo. Sus piedras son el cuarzo cristal, la hematita y las perlas blanca, gris y negra.

Rojo.- Representa la pasión, no sólo sexual sino por todos los aspectos de la vida. Aumenta el ánimo, la actividad, invita al ejercicio físico y desarrollo mental. Llama nuestra atención, despierta el vigor y nos invita a ponernos alerta, en todos los ámbitos. Pero su mejor aspecto es que aviva el amor y la armonía entre todos. El coral, el granate, la malaquita, el rubí, la unaquita y el zafiro, son algunas de las piedras de este bello color.

Rosa.- Aunque es uno de los colores más energéticos, se asocia con la delicadeza y el refinamiento. Estimula el amor, la ternura, la calma, la compasión y la fantasía. Anula la ira y el enfado, pero también alivia los problemas ginecológicos, hormonales, nerviosos y todo lo relacionado con la falta de sueño. Así, las piedras más populares de este color son el cuarzo, la kunzita, la morganita, la rodonita, el topacio y el zafiro.

Verde.- Este color se relaciona con la tierra, la cosecha, la salud, la felicidad y el equilibrio. Ayuda a calmar a las personas hiperactivas, el reumatismo y elimina la toxicidad del cuerpo. Mejora la economía y la calidad de vida, como también garantiza las buenas cosechas. Sus piedras son la esmeralda, el jade, el peridoto, la malaquita y el topacio.

La variedad de sus colores es infinita y son un bello regalo que la naturaleza nos da. Independientemente de sus propiedades esotéricas, medicinales o creencias populares, representan una promesa de amor, un secreto inconfesable, una súplica de perdón, un agradecimiento permanente y hasta la esperanza de un futuro maravilloso.

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