La lucha de Carolina del Norte por la recuperación tras el huracán Helene
Republicanos y demócratas debaten el destino de los fondos mientras miles de hogares siguen en ruinas
La devastación de Helene y la necesidad de fondos
El huracán Helene dejó una marca imborrable en Carolina del Norte. Con más de 100 muertes registradas, 74,000 hogares afectados y miles de millas de carreteras dañadas, su impacto ha sido descomunal. El estado calcula que el fenómeno climático dejó daños por un récord de $59.6 mil millones. En respuesta, el gobierno federal ha comprometido más de $15 mil millones para la reconstrucción.
Propuestas enfrentadas en la legislatura
El gobernador demócrata Josh Stein solicitó esta semana $1.07 mil millones para ayudar en la recuperación de la tormenta, pero los legisladores republicanos han presentado una alternativa de apenas $500 millones. Aunque ambas propuestas incluyen $150 millones para iniciar un programa de reconstrucción y reparación de viviendas en las montañas, existen diferencias clave en la asignación de otros fondos.
Disputas sobre subsidios a empresas y gobiernos locales
Uno de los puntos conflictivos es la solicitud de $150 millones de Stein para programas de subvenciones destinados a negocios afectados por la tormenta. Los republicanos han eliminado esta partida, argumentando que el estado no debería proporcionar subvenciones directas a empresas sino préstamos. De igual forma, la propuesta republicana omite los $100 millones que Stein había solicitado para ayudar a gobiernos locales a compensar ingresos perdidos debido a la catástrofe.
Errores pasados y estrategias para el futuro
Para los republicanos, es crucial evitar errores de reconstrucción del pasado, como los programas implementados bajo el gobernador Roy Cooper tras el huracán Matthew en 2016 y Florence en 2018. Esfuerzos anteriores aún necesitan $217 millones para completar la construcción de más de 1,100 viviendas en la región oriental del estado.
El impacto humano de las demoras en la ayuda
A medida que el debate legislativo continúa, miles de familias aún viven en condiciones precarias y negocios luchan por sobrevivir. Stein ha advertido que sin una inyección rápida de fondos, la recuperación se retrasará aún más, aumentando el número de empresas cerradas, retrasos en la construcción de viviendas y problemas educativos para los niños que han perdido días de clases.
¿Cómo se resolverá el impasse?
El próximo paso es la revisión de enmiendas por parte de la Cámara de Representantes, seguida de una votación. Mientras tanto, el Senado republicano ha presentado su propia versión de un proyecto de ley de alivio por desastre. Lo que ocurra en las próximas semanas pondrá a prueba la capacidad de Stein para negociar con un legislativo controlado por los republicanos, quienes se encuentran a solo unos escaños de tener una mayoría a prueba de veto.