Antonio Gates, Jared Allen y Sterling Sharpe entran al Salón de la Fama de la NFL en una clase histórica

La edición 2024 del Salón de la Fama cuenta con una de las clases más pequeñas en dos décadas tras cambios en las reglas de selección.

Una selección exclusiva para 2024

Antonio Gates, Jared Allen, Eric Allen y Sterling Sharpe fueron seleccionados para entrar al Salón de la Fama del Fútbol Americano Profesional en una de las clases más reducidas de los últimos 20 años. La votación se llevó a cabo en la premiación de los NFL Honors, en un evento que marcó un cambio respecto a años anteriores tras nuevos criterios de selección.

Uno de los momentos más destacados de esta elección es la entrada de Sterling Sharpe, quien se une a su hermano Shannon Sharpe, convirtiéndose en la primera dupla de hermanos en ser inmortalizados en el Salón de la Fama de la NFL.

¿Por qué tan pocos elegidos?

En años anteriores, el número de elegidos oscilaba entre siete y ocho, sin embargo, este año solamente cuatro jugadores fueron seleccionados, lo que rompe con la tradición de los últimos 12 años. Para encontrar un número de seleccionados igual de reducido hay que remontarse a 2005, cuando también ingresaron solo cuatro jugadores.

El cambio en las reglas de selección surgió tras una iniciativa por parte de miembros del Salón de la Fama, quienes buscaban que la institución fuera aún más exclusiva. Ahora, los votantes reducen el grupo de 15 finalistas a siete, para luego evaluar si al menos cinco merecen ingresar. Cada candidato necesita el 80% de aprobación para entrar.

Antonio Gates: de la cancha de baloncesto al olimpo del fútbol americano

Antonio Gates es, sin duda, uno de los casos más fascinantes de la NFL. Originalmente, Gates jugaba baloncesto en la Universidad de Kent State y nunca disputó un partido de fútbol americano universitario. Sin embargo, logró transformar su carrera y convertirse en uno de los mejores alas cerradas en la historia de la NFL.

En sus 16 temporadas con los Chargers, Gates consiguió 955 recepciones, 11,841 yardas y el récord de más touchdowns en la historia de la NFL para un ala cerrada con 116 anotaciones. Su velocidad, fuerza y capacidad para atrapar balones en la zona de anotación marcaron una época y redefinieron la posición.

Jared Allen: un cazamariscales legendario

Allen fue una de las fuerzas defensivas más dominantes en su tiempo. Con 136 capturas de mariscal de campo acumuladas en su carrera, Allen supo aterrorizar a los pasadores rivales con su agresividad e instinto.

Tuvo una temporada histórica en 2011 con los Vikings, donde registró 22 capturas, quedándose a solo 0.5 del récord histórico para una sola temporada. Además, su capacidad para presionar al mariscal y frenar el juego por tierra lo convirtieron en una pieza esencial en cada equipo donde jugó.

Sterling Sharpe: una carrera brillante, aunque truncada

La inclusión de Sharpe en el Salón de la Fama es un reconocimiento tardío, pero merecido. Durante siete temporadas con los Packers de Green Bay, Sharpe brilló como uno de los mejores receptores abiertos de la liga. En 1992 se convirtió en el sexto jugador en lograr la triple corona, liderando la liga en recepciones, yardas y touchdowns.

Su carrera se vio truncada prematuramente por una lesión en el cuello, lo que le impidió seguir acumulando estadísticas en la NFL. Sin embargo, en su tiempo activo, solo Jerry Rice tuvo mejores estadísticas en cuanto a recepciones y anotaciones. Ahora, junto a su hermano Shannon, forman la primera pareja de hermanos en el Salón de la Fama.

Eric Allen: el maestro de las intercepciones

Eric Allen fue uno de los mejores esquineros de su época y jugó en la NFL durante 14 temporadas, destacándose por su capacidad para leer a los mariscales de campo y robar balones.

Terminó su carrera con 54 intercepciones, de las cuales ocho regresó para touchdown. Fue una pieza clave en defensivas dominantes de equipos como los Eagles y los Raiders, además de haber jugado en momentos icónicos, como el famoso Fog Bowl en 1988.

¿Decepcionó la omisión de Eli Manning?

Uno de los temas debatidos en la votación fue la omisión de Eli Manning, dos veces campeón del Super Bowl y MVP de ambas ediciones. A pesar de su impresionante currículum, los votantes decidieron dejarlo fuera este año. Esto significa que, por ahora, no será inmortalizado junto a su hermano Peyton Manning en Canton.

Sin embargo, su nombre seguirá en la conversación para futuras inducciones.

Una ceremonia esperada

La ceremonia de inducción se llevará a cabo el 2 de agosto de 2024, y será un evento especial debido a la exclusividad de la clase de este año.

Esta clase de 2024 marcará un antes y un después en la forma en que se admira y selecciona a los mejores jugadores en la historia de la NFL. Aunque se redujo el número de integrantes, el legado de cada uno de estos jugadores sigue siendo incuestionable.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press