El aeropuerto internacional de Les Cayes: un nuevo respiro para Haití
La reapertura del aeropuerto Antoine Simon brinda una alternativa segura en medio de la crisis de violencia en Puerto Príncipe.
Haití enfrenta una de las crisis más graves de su historia reciente. Con la capital, Puerto Príncipe, sumida en la violencia de las pandillas y el tráfico aéreo prácticamente paralizado, cada pequeña mejora en la infraestructura del país representa un rayo de esperanza. En este contexto, la reapertura del aeropuerto Antoine Simon en Les Cayes como terminal internacional marca un punto de inflexión para la movilidad, la economía y la ayuda humanitaria.
Un aeropuerto con historia
Ubicado en la ciudad costera de Les Cayes, el aeropuerto Antoine Simon recibió su nombre en honor a un presidente haitiano que lideró una rebelión a principios del siglo XX. Su operación comenzó hace casi dos décadas antes de que cerrara para renovaciones en 2013, con el objetivo de mejorar y extender su pista de aterrizaje.
Ahora, tras años de trabajos, este se ha convertido en el tercer aeropuerto internacional del país, uniéndose a los de Puerto Príncipe y Cap-Haitien. Esta reapertura no solo representa una alternativa de viaje más segura, sino también una oportunidad para el desarrollo económico y la distribución de ayuda humanitaria.
Una alternativa ante la crisis de Puerto Príncipe
Desde noviembre de 2024, las principales aerolíneas comerciales han suspendido sus vuelos a Puerto Príncipe tras ataques de pandillas contra aviones en aterrizaje o despegue, lo que resultó en heridas a una auxiliar de vuelo. Como resultado, gran parte del tráfico aéreo internacional se ha dirigido a Cap-Haitien, en el norte del país, lo que ha complicado la logística del transporte terrestre a otras regiones.
Con la apertura del aeropuerto en Les Cayes, las aerolíneas y organizaciones humanitarias cuentan ahora con un punto de entrada en el suroeste haitiano, evitando la peligrosa travesía por las carreteras controladas por pandillas.
Impacto en la economía y la ayuda humanitaria
El desarrollo de este aeropuerto es visto como un paso clave para fortalecer la infraestructura haitiana. Leslie Voltaire, presidente del consejo presidencial de transición, destacó que este proyecto puede impulsar sectores como el turismo y el comercio.
La ciudad de Les Cayes es un punto estratégico para muchas organizaciones de ayuda humanitaria. Hugh Aprile, director regional de Mercy Corps para América Latina y el Caribe, mencionó que muchas ONGs podrían establecer equipos en Les Cayes en lugar de en Puerto Príncipe. Esto facilitaría los esfuerzos para distribuir ayuda médica y alimentaria en el sur del país, donde las necesidades son urgentes.
“Es una gran noticia”, comentó Wynn Walent, director ejecutivo de Locally Haiti, una organización con base en Colorado. “Entendemos la gravedad de la crisis en Puerto Príncipe, pero es importante recordar que hay muchas cosas que se pueden hacer en otras regiones del país.”
¿Y los vuelos comerciales?
Aunque el aeropuerto de Les Cayes ya está habilitado para vuelos internacionales, queda la interrogante de si aerolíneas estadounidenses o europeas comenzarán operaciones regulares allí. Hasta el momento, JetBlue ha enviado técnicos a inspeccionar la pista, aunque no ha confirmado su intención de operar vuelos comerciales.
Además, el gobierno de Estados Unidos mantiene prohibidos los vuelos desde y hacia Puerto Príncipe hasta al menos el 12 de marzo de 2025, lo que podría afectar cualquier decisión de reactivación aérea en la región.
Un paso adelante en tiempos de incertidumbre
A pesar de las limitaciones, la reapertura del aeropuerto Antoine Simon es una señal de progreso para Haití en medio de una crisis profunda. Con mejores opciones de conectividad, el país puede facilitar el ingreso de ayuda, estimular el comercio y mejorar la seguridad de quienes necesitan desplazarse dentro y fuera del territorio haitiano.
Queda por ver cómo responderán tanto las aerolíneas como la comunidad internacional ante esta nueva alternativa. Sin embargo, lo que es seguro es que cualquier mejora en la infraestructura haitiana es un paso hacia la estabilización y reconstrucción de una nación golpeada por múltiples crisis.