Récords, revolución y triples: La NBA entra en la era del bombardeo desde el perímetro

El baloncesto moderno se ha transformado en un juego de velocidad, spacing y sobre todo, tiros de larga distancia. Lo que empezó como una lenta evolución del juego con la introducción del tiro de tres puntos en 1979, hoy se ha convertido en la piedra angular de las ofensivas en la NBA. La temporada 2024-25 lo confirma: nunca se lanzaron ni se anotaron tantos triples en la historia de la liga.

Una lluvia de triples sin precedentes

El domingo 6 de abril de 2025, Sam Hauser, jugador de los Boston Celtics, anotó el triple número 31,580 de la temporada en la NBA, batiendo el récord establecido el año anterior. Lo más impactante es que este logro ya no sorprende: es la undécima vez en las últimas 13 temporadas que se rompe el récord de triples por campaña.

Y no solo se superan marcas ligueras, sino también franquicias individuales: 15 equipos han roto registros propios de triples intentados, anotados o ambos. Esta avalancha desde el perímetro ha cambiado cómo se juega, cómo se defiende y cómo se construyen las plantillas.

Los Celtics a la vanguardia de la revolución

Los Boston Celtics lideran esta transformación. Ya establecieron el récord de más triples anotados por un equipo en una temporada y, con apenas cinco intentos más desde el perímetro en su partido contra los Wizards, también quebraron el récord histórico de intentos en una campaña, superando a los Houston Rockets de 2018-2019.

En ese partido, aplastaron 124-90 a unos Washington Wizards muy disminuidos, con 24 triples anotados por Boston, y una colosal suma de 62 rebotes, otro número que demuestra su controlío del juego moderno.

Triples e individualismo: una nueva era para las estadísticas

Los logros no se limitan a los equipos. Esta temporada ha visto a 130 jugadores superar la barrera de los 100 triples anotados, otro nuevo récord.

Pero hay más:

• Por primera vez en la historia de la NBA, podríamos ver a tres jugadores diferentes anotar más de 300 triples en una misma temporada.
• Anthony Edwards (303), Malik Beasley (301) y Stephen Curry (293) están liderando esta hazaña nunca antes vista.

Hasta ahora, solo tres jugadores lo habían logrado: Stephen Curry (quien ya lo ha hecho cinco veces), James Harden y Klay Thompson. Pero ahora, Edwards y Beasley pisan un terreno que antes era exclusivo de los tiradores más legendarios.

Triples por encima de dobles: hábitos de puntuación que cambian

El cambio en la forma en que se genera ofensiva es claro. Por primera vez:

• Menos de la mitad de los puntos creados en la NBA vienen desde tiros de dos puntos: apenas el 49.5%.
• Los triples ahora representan el 35.6% de los puntos totales, el porcentaje más alto de la historia.
• Los tiros libres siguen bajando en incidencia con un 14.9% (el segundo más bajo registrado).

En otras palabras: las bandejas están siendo reemplazadas por tiros desde la esquina, y las rotaciones defensivas son sometidas a ritmos frenéticos para cerrar en el perímetro.

Los Sacramento Kings y su ofensiva invertida

Un ejemplo reciente de este auge lo dio la victoria de Sacramento ante Cleveland por 120-113. Los Kings estuvieron muy erráticos en los primeros 24 minutos (apenas 4 de 17 en triples), pero en la segunda mitad explotaron con un 10 de 16 desde la línea de tres. Zach LaVine lideró con 37 puntos y encestó sus seis triples después del descanso.

Este cambio radical muestra cómo un solo aspecto —el desempeño desde larga distancia— puede virar el rumbo de un partido de forma total.

Además, en ese encuentro, DeMar DeRozan superó a Jerry West y se colocó en la posición número 26 en la lista histórica de anotadores de la NBA con 25,209 puntos. Este hito, sin embargo, ocurre en paralelo a un juego que se ha alejado del estilo de DeRozan —más orientado a los tiros de media distancia—, lo cual da aún más valor a su constancia.

¿Hasta dónde puede llegar la era del triple?

Es evidente que no hay vuelta atrás. Tan solo en los últimos 20 años, la tasa de triples anotados por partido ha subido un 141%; en la última década, un 72%; y en los últimos 2 años, un 9%. Estas cifras lo dicen todo.

La NBA futura podría tener reglas diferentes, ¿más cercanía en ciertas distancias? ¿cuatro puntos para tiros ultra lejanos? De momento, incluso la defensa más feroz sucumbe si se enfrenta a una ofensiva eficiente y rápida desde el triple. Equipos como Golden State, Boston o incluso Sacramento ya entienden esto como su ADN.

Las sorpresas que trae este cambio de paradigma

El dominio del triple también ha generado nuevas dinámicas:

• Los pívots tradicionales han perdido espacio, dando lugar a interiores móviles, capaces de lanzar y defender múltiples posiciones.
• Los escoltas deben ser tiradores compulsivos; la era del escolta slasher está en declive.
• Los partidos se resuelven en minigolpes de tres posesiones, lo que ha reducido el valor relativo de jugadas de dos puntos luchadas.

Solo sobreviven los equipos con profundidad en tiradores y versatilidad táctica. El Draft y la formación de jugadores en escuelas y universidades también han cambiado en consonancia.

¿El triple ha matado al basquetbol romántico?

La nostalgia no se ha hecho esperar. Muchos aficionados y analistas extrañan el juego de poste, las penetraciones calculadas, los tiros en suspensión controvertidos. Pero la NBA es una liga de tendencias y el triple llegó para quedarse.

Más aún, las estadísticas avanzadas certifican lo que visualmente ya es indiscutible: el triple eficiente es la herramienta definitiva en un deporte que valora el spacing, la eficiencia y la velocidad.

¿Qué nos espera en los próximos playoffs?

Equipos como Boston, Golden State y Sacramento afrontan la postemporada con ventaja debido a su capacidad para anotar en volumen desde el perímetro. Inclusive equipos que tradicionalmente dependían del juego en la pintura han adaptado sus esquemas para sobrevivir.

Será interesante observar si los estándares defensivos se ajustan para limitar los tiros en volumen o si, por el contrario, se amplifican las hazañas ofensivas. De cualquier manera, prepárate para ver rondas de playoffs que podrían decidirse más allá del arco.

La NBA: un espectáculo desde los 7.24 metros

Lo que comenzó con Tim Legler ganando el concurso de triples en los noventa como una curiosidad, hoy se ha vuelto lo más cotidiano. Es impensable imaginar un equipo competitivo en 2025 sin al menos cuatro o cinco jugadores con buen porcentaje desde la línea de tres.

El triple ya no es un lujo. Es una necesidad. Y en este nuevo escenario, los números solo reforzarán esta tendencia que aún no ha alcanzado su techo.