La lucha por reducir la mortalidad materna en Alabama: ¿avance legislativo o reacción tardía?

Un nuevo proyecto de ley busca acelerar el acceso a Medicaid para mujeres embarazadas en un estado con una alarmante tasa de mortalidad, especialmente entre mujeres afroamericanas

Alabama ha dado un paso legislativo importante destinado a combatir una crisis de salud pública que durante años ha afectado silenciosamente a miles de mujeres: la mortalidad materna e infantil.

Una medida unánime en un país dividido

En un sorprendente momento de consenso bipartidista, los legisladores de Alabama aprobaron por unanimidad un proyecto de ley que establece la elegibilidad presunta para Medicaid en mujeres embarazadas. Con esta legislación, el sistema comenzará a cubrir hasta 60 días de atención médica ambulatoria mientras se procesa la solicitud de seguro médico. El proyecto fue aclamado como una victoria por demócratas y republicanos por igual, aunque sus motivaciones difieren: mientras los republicanos lo etiquetaron como una medida “provida”, los demócratas lo defendieron por su potencial de vida o muerte para las mujeres más vulnerables.

Una emergencia oculta a plena vista

Los números detrás de la decisión legislativa son impactantes. Alabama registró una tasa de mortalidad materna de 64.63 muertes por cada 100,000 nacimientos entre 2018 y 2021 —casi el doble de la media nacional de 34.09 por cada 100,000 nacimientos. En mujeres afroamericanas, la tasa se dispara a 100.07 muertes, revelando una crisis de justicia racial y sanitaria.

“Estas cifras reflejan una negligencia histórica que va más allá de lo médico: es una cuestión de acceso, de pobreza, de racismo estructural —y de compromiso político”, afirma Loretta Hargrove, enfermera obstetra y activista comunitaria en Birmingham.

Una expansión de Medicaid que no llega

A pesar de las abrumadoras cifras, Alabama sigue siendo uno de los 10 estados que no ha ampliado Medicaid bajo las provisiones del Affordable Care Act (Obamacare). Esto significa que muchas mujeres tienen cobertura únicamente si están embarazadas, dejando un vacío peligroso para quienes necesitan atención médica previa o posterior al embarazo.

Como resultado, una de cada seis mujeres en edad fértil se encuentra en la llamada “brecha de cobertura”: ganan demasiado para calificar para Medicaid pero no lo suficiente para pagar un seguro privado. La organización Alabama Arise, grupo defensor de las familias de bajos ingresos, ha advertido que esto es especialmente grave en zonas rurales, donde los hospitales han cerrado dejando regiones enteras sin atención prenatal.

Asistencia prenatal tardía y sus consecuencias

Según datos de March of Dimes, una de cada cinco mujeres embarazadas en Alabama no recibe atención prenatal hasta después de los cinco primeros meses de gestación, o bien no alcanza el 50% de las visitas recomendadas durante el embarazo. Esto aumenta exponencialmente el riesgo de complicaciones, tanto para la madre como para el bebé. En 2023, el estado reportó que el 45% de todos los nacimientos fueron cubiertos por Medicaid, pero más del 50% de los bebés que murieron tras el parto nacieron de madres aseguradas por este programa.

¿Cuánto costará esta medida al estado?

El proyecto de ley podría aumentar los gastos de Medicaid en el estado en aproximadamente $1 millón anuales durante tres años, de los cuales dos tercios provendrán del gobierno federal. Es una inversión relativamente pequeña cuando se considera que podría salvar cientos de vidas y reducir los costos relacionados con partos complejos y complicaciones neonatales, que son tremendamente caros para los hospitales y sistemas sanitarios.

La geografía del abandono

El problema se intensifica en zonas rurales del estado, donde la clausura de hospitales ha dejado amplias regiones sin acceso a servicios obstétricos. Según cifras estatales, más del 80% de los condados rurales de Alabama no tienen un hospital con capacidad para parto. Las mujeres deben recorrer cientos de kilómetros para ver a un especialista, convirtiendo el derecho al cuidado prenatal en un lujo logístico y económico.

Midwives: alternativa bloqueada

Otro proyecto relacionado con el acceso al parto avanzó en marzo: uno que permitiría que las parteras brinden atención en centros de nacimiento fuera de hospitales. Sin embargo, enmiendas posteriores al proyecto de ley imposibilitan que estas profesionales realicen muchos exámenes médicos estándar, necesarios para detectar condiciones genéticas en recién nacidos. La Alabama Midwives Alliance denunció estas modificaciones como un retroceso que “desvirtúa completamente el espíritu original del proyecto”.

“Esto demuestra que el control político sigue priorizando ideologías por encima del derecho a un parto seguro y respetuoso”, señala María Gutiérrez, doula certificada en Mobile.

Presión política en aumento

Algunos líderes locales y organizaciones sin fines de lucro han comenzado a exigir no solo planes temporales como la elegibilidad presunta, sino una expansión total de Medicaid. Según una encuesta de 2023 del Public Affairs Research Council of Alabama (PARCA), el 63% de los residentes del estado apoyan expandir la cobertura. Aun así, los líderes políticos siguen resistiéndose, basando su oposición en argumentos fiscales.

Pero ¿a qué costo? Una encuesta del Commonwealth Fund en 2022 reveló que los estados que expandieron Medicaid redujeron sus tasas de mortalidad materna entre un 20% y un 50%. En cambio, Alabama sigue estancada en cifras comparables con naciones en desarrollo.

Una oportunidad para cambiar las estadísticas

La elegibilidad presunta a Medicaid representa un primer paso valioso, pero no debe verse como la solución definitiva. Numerosos expertos señalan que, sin una expansión más amplia y profunda del sistema de salud, las mujeres seguirán enfrentándose a barreras insostenibles durante uno de los periodos más vulnerables de sus vidas.

El reto más grande será traducir esta voluntad legislativa puntual en una política pública que garantice un sistema de salud maternal digno y accesible. Como dice el activista por la salud pública Theo Jennings: “Si podemos construir autopistas y estadios multimillonarios, también podemos garantizar nacimientos seguros”.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press