Pepsi revoluciona el fútbol femenino: conciertos previos en la Champions League femenina hasta 2030

UEFA y PepsiCo anuncian una colaboración histórica con shows musicales antes de cada final del torneo más importante de clubes femeninos, igualando la experiencia del masculino

La música y el fútbol femenino tienen una nueva alianza: la UEFA y PepsiCo han renovado su colaboración para dar paso a una nueva etapa de entretenimiento y visibilidad que promete revolucionar los partidos más importantes del balompié europeo femenino. Desde la temporada 2024-25 y hasta 2030, cada final de la UEFA Women’s Champions League contará con un espectáculo musical en vivo antes de que ruede el balón, al igual que sucede con la final masculina desde 2016.

PepsiCo y UEFA, una alianza que evoluciona

La colaboración entre PepsiCo y UEFA no es nueva. Desde 2015, la multinacional de bebidas es patrocinadora oficial de la Champions League masculina, y fue la responsable de iniciar la tradición de espectáculos musicales de alto nivel con la actuación de Alicia Keys en la final de 2016 en Milán. En 2018, Dua Lipa elevó la apuesta en la final celebrada en Kiev.

Ahora, PepsiCo extiende ese concepto al fútbol femenino en un acuerdo multianual que también incluye la promoción de sus marcas asociadas, como Lay’s y Gatorade, durante los eventos de fútbol organizados por la UEFA.

Un impulso al espectáculo y la igualdad

En palabras de Nadine Kessler, directora del fútbol femenino de UEFA:

“Esto no es solo un entretenimiento previo; es un símbolo de que el fútbol femenino merece el mismo sentido de grandiosidad y celebración que el masculino”.

El acuerdo va más allá de las finales. Pepsi se ha comprometido a llevar experiencias inmersivas a cada ronda eliminatoria desde los cuartos de final en adelante. Esto añade un componente de espectáculo en cada fase clave del torneo y representa un paso más hacia la equiparación del trato entre ambas competiciones.

Una Champions femenina renovada para 2025

La Women’s Champions League se encuentra en plena evolución. A partir de la próxima temporada adoptará el mismo formato tipo liga que estrenó el torneo masculino en 2023, generando un mayor número de partidos con relevancia competitiva desde temprano.

La final de esta primera edición con el nuevo formato se llevará a cabo en el Estadio Nacional de Noruega en Oslo, un hito que marcará además el debut de los conciertos musicales femeninos.

La influencia del modelo Super Bowl

La experiencia de PepsiCo no se limita al fútbol europeo. La empresa fue durante una década la principal patrocinadora del halftime show del Super Bowl, uno de los eventos más vistos a nivel mundial. Artistas como Dr. Dre, Eminem, Mary J. Blige, Snoop Dogg y 50 Cent formaron parte de la edición de 2022, considerada una de las más icónicas hasta ahora.

Con ese precedente, la llegada de este modelo de “infotainment” a la Women’s Champions League refleja un movimiento estratégico que apunta a captar un mayor público global, atraer marcas y elevar el perfil artístico del torneo.

Una inversión estratégica por la igualdad

Pero no se trata solamente del espectáculo. PepsiCo también apoyará otras áreas del desarrollo del fútbol femenino:

  • Los campeonatos femeninos sub-19 y sub-17 de la UEFA.
  • El UEFA Women’s Futsal EURO.
  • “Together #WePlayStrong”, una plataforma que promueve la participación de niñas y mujeres en el fútbol base.

Se trata de un respaldo hasta 2030 para un conjunto de torneos y programas que forman la base del crecimiento femenino en el fútbol europeo, tanto en élite como en categorías formativas.

Comparando los espectáculos: ¿hay igualdad real?

Uno de los debates abiertos es si estos conciertos en la Women’s Champions League lograrán atraer el mismo nivel de estrellas mediáticas que el torneo masculino.

Hasta ahora hemos visto figuras como Imagine Dragons (2019), Camila Cabello (2022), y más recientemente Anitta (2023) en las finales de hombres. ¿Se podrá igualar ese impacto en el femenino? Todo parece indicar que sí, especialmente con el respaldo de PepsiCo y su experiencia gestionando grandes shows.

Además, con eventos independientes en ciudades distintas (desde 2019, la final femenina ya no se celebra en la misma ciudad que la masculina), la final de la Champions League Femenina se ha fortalecido en identidad y proyección.

¿Y qué dice el marketing?

Desde el punto de vista del marketing deportivo, esta estrategia responde a un principio clave: creación de experiencia de usuario. Así lo plantea el experto en mercadeo deportivo Sebastián Barrios en “Sportainment y Génesis de Marca” (2023):

“En la nueva era del deporte, no es suficiente con el rendimiento. Los aficionados buscan conexión emocional y momentos memorables antes, durante y después del encuentro”.

El acuerdo UEFA-PepsiCo apunta directamente a esa dirección, posicionando el fútbol femenino como mucho más que un producto “adicional” o complementario al masculino.

Un mensaje global desde Europa

Europa sigue marcando el camino en términos de institucionalización y visibilidad del fútbol femenino. Ligas como la Women’s Super League inglesa, la Primera División española femenina y la Division 1 Féminine francesa han duplicado o triplicado sus audiencias desde 2021.

La UEFA, al institucionalizar este tipo de espectáculos previos también en el fútbol femenino, envía un mensaje potente al resto del mundo: el fútbol femenino está para quedarse y puede brillar igual o más que el masculino.

Y es una buena noticia para sus protagonistas: jugadoras, técnicos, clubes, patrocinadores y, especialmente, las nuevas generaciones de futbolistas y aficionados femeninas que tendrán referentes dentro y fuera del campo.

Próximos pasos… y expectativas

El acuerdo recién firmado cubrirá el periodo 2025-2030, pero ya genera expectativas para conocer quién será la primera artista invitada a un show musical en la final femenina.

Hay rumores sobre posibles candidatas con fuerte arraigo europeo como Adele, Rosalía, Zara Larsson o incluso Karol G si se consolidan alianzas transatlánticas de marketing.

Lo que es claro es que esta apuesta por el espectáculo no busca solo entretener, sino abrir el camino hacia una nueva normalidad de paridad estructural entre los dos máximos torneos de clubes del mundo.

Y quizás, como dijo alguna vez Megan Rapinoe: “No estamos pidiendo igualdad por compasión, sino porque lo merecemos”.

Que empiece el show… también en el fútbol femenino.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press