Gaza bajo fuego: la guerra sin fin entre Israel y Hamas

Más de 50.000 muertos, negociaciones estancadas y un conflicto que sigue redefiniendo el equilibrio en Medio Oriente

  •  EnPelotas.com
    EnPelotas.com   |  

La Franja de Gaza, una vez más, se encuentra en el ojo del huracán. Las explosiones no cesan, las víctimas se acumulan y los desplazados sobreviven entre ruinas. El conflicto entre Israel y Hamas ha estallado con una violencia sin precedentes desde el colapso del último alto al fuego, creando una crisis humanitaria que roza lo indescriptible.

Otra jornada sangrienta: 15 muertos en Shijaiyah

Este miércoles, un ataque aéreo israelí impactó un edificio residencial de cuatro pisos en el barrio de Shijaiyah, en Ciudad de Gaza, dejando al menos 15 fallecidos y más de 40 heridos, según el Ministerio de Salud de Gaza. Más de la mitad de las víctimas eran mujeres y niños. Equipos de rescate aún buscaban cuerpos entre los escombros.

El ejército israelí afirmó haber eliminado en el ataque a un alto dirigente de Hamas presuntamente vinculado a operaciones armadas desde esa zona. Sin embargo, no ofreció nombre ni más detalles. Israel sostiene que la responsabilidad por la muerte de civiles es del grupo militante, debido a su estrategia de operar desde zonas densamente pobladas.

Una guerra de 18 meses sin tregua real

El conflicto se reanudó con toda su fuerza tras el colapso de una tregua de ocho semanas que había permitido algunos intercambios de prisioneros y un respiro en los combates. Desde entonces, Israel ha intensificado sus ataques en el norte de Gaza, imponiendo además bloqueos totales de alimentos, combustible y ayuda humanitaria. El objetivo declarado: destruir a Hamas y crear un corredor de seguridad en el enclave.

Pero los costos son exorbitantes. Según el Ministerio de Salud palestino, más de 50,000 personas han muerto en Gaza desde que comenzó la guerra en octubre de 2023. Este número incluye combatientes, pero se estima que más de la mitad de las víctimas eran mujeres y niños.

La ofensiva más letal en la historia del conflicto israelí-palestino

El ataque del 7 de octubre de 2023, en el que Hamas ingresó a territorio israelí y mató a 1,200 personas mientras tomaba a unas 250 como rehenes, marcó el inicio de lo que se considera el episodio más violento en décadas. Israel respondió con una campaña de bombardeos incesantes, operaciones terrestres en varios puntos de Gaza e incluso ataques contra objetivos considerados aliados de Hamas en países como Líbano e Irán.

Evacuaciones masivas y desesperación humanitaria

La intensidad de los bombardeos y las operaciones militares ha obligado a miles de personas a abandonar sus hogares. Israel ha emitido órdenes de evacuación extensas, especialmente en zonas como Shijaiyah, Beit Lahia y áreas del sur, empujando a la población civil a zonas cada vez más reducidas y peligrosas.

Los bloqueos han generado una catástrofe logística. Escasean alimentos, agua, combustible y medicamentos. Hospitales han colapsado. La ONU ha advertido que Gaza está al borde de una hambruna total.

Las negociaciones: un camino sin salida

A pesar de los esfuerzos de mediadores de Turquía, Catar, Egipto e incluso Estados Unidos, las negociaciones para un nuevo alto al fuego están estancadas. Hamas exige la suspensión completa de la ofensiva israelí antes de liberar a los 59 rehenes que aún mantiene, de los cuales se estima que 24 continúan con vida. Israel, por su parte, no está dispuesto a detener las operaciones sin ver a Hamas completamente desmantelado.

El primer ministro israelí Benjamin Netanyahu ha reafirmado su posición en múltiples ocasiones: “No habrá tregua mientras Hamas exista o mantenga rehenes”. Las presiones internas de su coalición de ultra derecha para continuar la guerra son fuertes y constantes.

Estados Unidos, Trump y una visión inquietante

Netanyahu viajó recientemente a Washington para reunirse con el presidente Donald Trump. Aunque ambos expresaron solidaridad con las víctimas y los rehenes, no fue anunciado ningún plan concreto para frenar las hostilidades.

Trump, en cambio, sorprendió con una visión post-conflicto que ha despertado alertas diplomáticas en toda la región: propuso tomar control de Gaza y reubicar parte de su población. Sus aliados tradicionales en Oriente Medio han reaccionado con profundo malestar. Sin embargo, Israel parece simpatizar con esa idea.

Una región al borde del abismo

Los ecos de la guerra resuenan más allá de Gaza. Yemen ha visto una escalada de ataques de parte de los rebeldes hutíes, apoyados por Irán. Líbano y Siria han sido escenarios de enfrentamientos con Hezbollah. En Irán, el asesinato de figuras vinculadas a Hamas y Hezbollah sugiere operaciones encubiertas israelíes que aumentan las tensiones con Teherán, cuyo programa nuclear también sigue siendo una amenaza latente.

En abril de 2024, Irán lanzó un ataque sin precedentes con más de 300 misiles y drones hacia Israel, de los cuales la mayoría fue interceptado. La respuesta israelí fue contundente, con bombardeos sobre instalaciones iraníes días después. El ciclo de represalias no hace sino aumentar la posibilidad de un conflicto regional directo.

Una tragedia sin visos de resolución

Lo que comenzó como un enfrentamiento centrado en la Franja de Gaza se ha convertido en una guerra que redefine el equilibrio de fuerzas en todo Oriente Medio. Irán, Israel, Estados Unidos, Hamas, Hezbollah y otras milicias de la llamada “resistencia” están en una espiral explosiva.

Para la población civil, tanto israelí como palestina, la situación se ha convertido en una pesadilla diaria. Las negociaciones están estancadas. Las ofensivas continúan. Y el precio, como siempre, lo pagan los inocentes.

Las preguntas que nadie puede responder

  • ¿Puede alguna de las partes “ganar” verdaderamente esta guerra?
  • ¿Se puede derrotar una ideología con bombas?
  • ¿Qué sucede si Israel cumple su promesa de tomar parte de Gaza?
  • ¿Cómo responderá Irán ante futuros ataques?
  • ¿Pueden los actores internacionales realmente mediar en un conflicto tan enconado?

Por ahora, las respuestas están obnubiladas por el humo de los edificios bombardeados y por los gritos de auxilio de una tierra devastada. Gaza, una vez más, sangra ante los ojos del mundo.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press