El resurgir del Magic y la apuesta arriesgada de los Mavericks: ¿rumbo al éxito o al precipicio?

Entre la alegría en Orlando por una dominante victoria en el play-in y el escepticismo en Dallas tras el traspaso de Luka Doncic, el Este y el Oeste de la NBA viven historias muy distintas

Orlando brilla en el play-in: Cole Anthony lidera una noche mágica

En una noche llena de emoción y expectativa en el Kia Center de Orlando, el Magic hizo historia al conseguir su primera victoria en un Torneo Play-In de la NBA. Con una contundente actuación colectiva, el equipo de Jamahl Mosley dominó 120-95 a los Atlanta Hawks y se aseguró el séptimo puesto en la Conferencia Este, clasificándose oficialmente para los playoffs 2025.

Cole Anthony fue la gran figura del encuentro saliendo desde el banquillo, con 26 puntos y seis asistencias. Fue un desempeño especialmente significativo considerando que promedió apenas 9.4 puntos por partido durante una temporada afectada por las lesiones. "Siempre supe que estaba listo para este momento. Sólo necesitaba la oportunidad", declaró Anthony tras el partido.

Paolo Banchero también tuvo una actuación destacada con 17 puntos, nueve rebotes y siete asistencias, mientras que Wendell Carter Jr. agregó 19 puntos y siete tablas. La joven promesa Anthony Black sorprendió con una efectividad letal, anotando 16 puntos en 6 de 7 intentos. Este fue un ejemplo perfecto del potencial que el Magic ha venido cultivando desde la reconstrucción tras la era de Dwight Howard.

Atlanta sin rumbo: otro play-in sin premio

Para los Hawks, la pesadilla se repite. Esta es su tercera aparición en el Play-In en las últimas cuatro temporadas y, nuevamente, no logran consolidarse. La expulsión de Trae Young en el último cuarto, tras dos técnicas, reflejó el descontrol de un equipo que parece haber perdido la brújula. Young dejó el partido con 28 puntos y seis asistencias, pero su falta de disciplina costó caro en un momento crucial.

Georges Niang con 15 puntos y Onyeka Okongwu con 11 puntos y nueve rebotes ofrecieron algo de resistencia, pero no fue suficiente para contener el vendaval que representó Orlando. Ahora, los Hawks tendrán una última oportunidad de ingresar a los playoffs el viernes frente al ganador del duelo entre los Chicago Bulls y el Miami Heat.

Dallas Mavericks: del astro Luka Doncic a la esperanza en Anthony Davis

Mientras tanto, en el otro extremo del país, la franquicia de los Dallas Mavericks vive una atmósfera muy distinta. Todavía reverberan las secuelas de uno de los traspasos más impactantes en la historia reciente de la NBA: la salida de Luka Doncic, quien fue enviado a los Los Angeles Lakers a cambio de Anthony Davis, en un supuesto intento de crear una plantilla campeona junto a Kyrie Irving, Klay Thompson, P.J. Washington Jr. y el joven Dereck Lively II.

Nico Harrison, gerente general de los Mavericks, defiende la movida con firmeza. "No me arrepiento del traspaso", dijo Harrison en su primera aparición pública tras la debacle. "Con Kyrie, Klay, P.J., Anthony Davis y Lively tenemos un equipo con calibre de campeonato", añadió.

Sin embargo, los hechos han sido crueles: Davis se lesionó en su debut con Dallas y Kyrie Irving se rompió el ligamento cruzado anterior poco después. La dupla estelar apenas compartió cancha durante dos cuartos y medio.

La historia pesa: Doncic, el heredero natural de Nowitzki

Doncic, segundo máximo ídolo de la franquicia tras Dirk Nowitzki, era visto como el heredero natural del alemán. Recordemos que la temporada 2023-24 terminó con Dallas alcanzando las Finales de la NBA, con un Doncic de apenas 25 años deslumbrando al planeta baloncestístico. Su partida generó una tormenta de críticas, abucheos en cada estadio y pancartas pidiendo la cabeza de Harrison.

"Sabíamos que iba a haber una reacción emocional intensa", admitió el directivo. "Pero si Davis e Irving no se lesionaban, nadie estaría cuestionando esta decisión", agregó, convencido de que la historia reivindicará su apuesta.

Un play-in mucho más complicado para Dallas

En el presente, los Mavs ocupan el décimo lugar en la Conferencia Oeste y enfrentan una ruta escarpada para clasificar a los playoffs. Primero deberán vencer en Sacramento a los Kings, noveno sembrado, y después batir al perdedor entre Golden State y Memphis —todo esto en condición de visitante.

Para colmo, el coach Jason Kidd ha debido armar rotaciones con recursos limitados, al punto de que en varios partidos apenas pudieron completar el mínimo de ocho jugadores disponibles. Aun así, el equipo ha mostrado garra, lo que incrementa el optimismo de Harrison. "Los jugadores no se rindieron y eso para mí lo cambia todo", sentenció.

Chicago vs. Miami: el duelo por la vida

En el este, la disputa entre los Chicago Bulls (39-43) y el Miami Heat (37-45) por el último puesto de play-in promete emociones extremas. Ambos equipos llegan con trayectorias similares en la recta final y con planteles plagados de bajas sensibles.

Chicago es el tercer mejor equipo de la liga en triples, con 15.4 tiros de tres convertidos por juego. Lidera la ofensiva Coby White, con 2.9 triples por partido, mientras que Nikola Vucevic promedia 18.5 puntos y 10.1 rebotes. En sus últimos 10 partidos, los Bulls tienen récord de 7-3, con 121.4 puntos por encuentro.

Miami, por su parte, cuenta con Bam Adebayo (7.2 rebotes defensivos por juego) como punta de lanza defensiva y con un Tyler Herro encendido (22.5 puntos de promedio en los últimos 10 partidos). El equipo del sur de la Florida muestra solidez —y experiencia— en este tipo de instancias, aunque las lesiones también han resentido su plantilla.

¿Rebote para Orlando? ¿Redención para Dallas?

Mientras Orlando se ilusiona con un renacer liderado por su núcleo joven que ya da sus primeros pasos en playoffs, el debate continúa en Dallas: ¿Hicieron lo correcto al generar un terremoto con la salida de Doncic? Sólo el tiempo y los resultados podrán responderlo, pero la lección es clara: en la NBA, las apuestas grandes pueden generar gloria… o ruina.

Y como bien dijo Nico Harrison, “una vez que ganemos, los aficionados regresarán”. La única duda es si estará allí para verlo.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press