¿Importa la edad en el Draft de la NFL? La nueva era de los veteranos universitarios

Bo Nix ya cumplió 25 años. Michael Penix Jr. llegará a esa edad en mayo. Ambos son quarterbacks seleccionados en la primera ronda del Draft de la NFL de 2024. Y forman parte de una tendencia creciente: el ingreso al profesionalismo de jugadores considerablemente mayores tras extensas carreras universitarias.

Una generación moldeada por la pandemia

Desde 2020, el panorama del fútbol americano universitario cambió drásticamente. La pandemia de COVID-19 forzó a la NCAA a flexibilizar sus reglas, otorgando un año adicional de elegibilidad a los jugadores. Esto provocó una acumulación de talento veterano en las universidades, y hoy estamos viendo los efectos en los drafts de la NFL.

Veamos los números:

• En el Draft de 2020, solo 19 jugadores de 24 años o más fueron seleccionados.
• En 2021, bajó a 16 jugadores.
• Luego la cifra se disparó: 44 en 2022, 54 en 2023, y 56 en 2024.

¿Estamos ante una anomalía temporal, o el inicio de una nueva era? Aunque la "ventana COVID" de elegibilidad extra está cerrándose, elementos como el transfer portal y los contratos por derechos de nombre, imagen y semejanza (NIL, por sus siglas en inglés) podrían mantener esta tendencia.

El tabú de la edad: ¿aún existe?

Tradicionalmente, los equipos de la NFL veían la edad como una bandera roja. Un prospecto de 24 o 25 años era percibido como alguien con menor potencial a largo plazo. La lógica era simple: si todo lo demás es igual, mejor invertir en alguien más joven.

Sin embargo, declaraciones de entrenadores y gerentes generales reflejan un cambio de mentalidad.

Andy Reid, entrenador de los Chiefs de Kansas City, dijo:

“Vengo de BYU, donde los jugadores hacen misiones por un par de años. Siempre decían que eran muy viejos... pero después ves que hacen un buen trabajo.”

Por su parte, John Spytek, gerente general de los Raiders, destaca el enfoque en el talento más allá de la fecha de nacimiento:

“Solo estoy buscando buenos jugadores. Quiero que mis ojeadores también piensen así.”

Jugadores destacados y sus caminos atípicos

Uno de los ejemplos más llamativos fue Tyler Shough, el quarterback de Louisville, quien llegó al scouting combine con 26 años, tras pasar por tres universidades: Oregon, Texas Tech y finalmente Louisville. En su viaje universitario, incluso fue suplente de Justin Herbert en 2019.

Entre otros prospectos mayores de 24 en el combine de 2024 estuvieron:

• Bru McCoy (receptor, Tennessee)
• Nick Nash (receptor, San José State)
• Andrew Armstrong (receptor, Arkansas)

Es destacable también el ascenso mediático de quarterbacks mayores como Jayden Daniels, quien también cumplió 24 años y llevó a su equipo a los playoffs, al igual que Nix.

La experiencia como ventaja competitiva

Mientras que los novatos más jóvenes pueden ofrecer longevidad, la experiencia de los jugadores mayores puede traducirse en contribuciones inmediatas. El ejemplo más evidente es la diferencia entre Anthony Richardson y los ya mencionados Nix y Daniels.

Richardson, seleccionado con la cuarta elección global del Draft de 2023 por los Colts, solo lanzó 393 pases en toda su carrera universitaria. Ha tenido problemas para adaptarse y no ha generado el mismo impacto inicial que Nix o Daniels.

El gerente general de los 49ers, John Lynch, analiza así el dilema:

“¿Estamos buscando que este jugador nos dure 12 años? Si ese es el criterio, hablamos de un porcentaje muy pequeño. Tal vez lo ideal es conseguir uno para su primer contrato, y luego ver qué pasa.”

Históricos que no rindieron a pesar de su edad

Claro está, la edad no siempre es sinónimo de éxito. Dos casos emblemáticos de quarterbacks mayores en la historia del Draft son:

• Chris Weinke: seleccionado a los 28 años y 264 días en la cuarta ronda en el año 2000 por los Panthers. Su récord como titular fue de 2-18.
• Brandon Weeden: elegido en la primera ronda por los Browns en 2012 con 28 años y 195 días. Terminó con un récord de 6-19 como titular.

Ambos, sin embargo, tenían en común haber jugado béisbol profesional antes de volver al fútbol americano, lo que alteró su trayectoria.

La lógica del draft moderno

Para muchos equipos, especialmente en rondas avanzadas (día 3), la edad ya no es un criterio de descarte. En el Draft de 2024, la mayoría de los jugadores mayores fueron seleccionados en la sexta o séptima ronda. Aquí ya no se busca un mariscal del futuro, sino jugadores que puedan contribuir desde el día uno en equipos especiales o roles secundarios.

El gerente general de los Chargers, Joe Hortiz, lo resume bien:

“Si dos jugadores tienen la misma calificación, empiezas a evaluar otros factores: ¿Ha sido capitán? ¿Tiene más experiencia como titular? Esos detalles pueden inclinar la balanza.”

Implicaciones para el futuro del scouting

Para los scouts que recorren universidades y analizan cientos de jugadores, esta nueva realidad representa un desafío logístico y estratégico.

John Spytek explicó:

“Vas a Georgia, Michigan, Ohio State... ahora cada escuela tiene 30 jugadores potenciales. Ya no son solo 10 juniors. Hay quintos y sextos años que consideran volver. Hay más incertidumbre, más nombres y menos tiempo.”

En este contexto, los departamentos de scouting se vuelven esenciales para filtrar el talento de manera eficaz.

Un mercado más sofisticado y contextual

Aunque la "moda" de jugadores mayores podría reducirse con el cierre de la ventana COVID, los NIL y la facilidad de transferencia podrían mantener a jugadores en la universidad más tiempo. Comenzar una carrera NFL a los 24 o incluso 26 años podría convertirse en parte del nuevo molde, especialmente para quarterbacks.

El enfoque debe inclinarse hacia el contexto. ¿Tiene experiencia? ¿Viene de un programa competitivo? ¿Su edad refleja madurez o simplemente una trayectoria atípica?

Esta mentalidad más matizada promete enriquecer el Draft, donde el talento y el presente pesan tanto —o más— que el supuesto techo de desarrollo.