Lesiones, frustraciones y regresos: la resiliencia de las estrellas de la MLB en 2025

Royce Lewis, Shota Imanaga y otros jugadores muestran cómo enfrentan el desafío de las lesiones mientras sus equipos buscan mantenerse competitivos

Un año marcado por lesiones clave en la MLB

En esta temporada 2025 de las Grandes Ligas, las lesiones han sido protagonistas indeseadas. Figuras como Royce Lewis de los Minnesota Twins o Shota Imanaga de los Chicago Cubs han sufrido interrupciones significativas en su rendimiento debido a problemas físicos, lo que no solo ha afectado sus estadísticas personales, sino también el rendimiento de sus equipos. Mientras tanto, momentos de gloria inesperada como el doble decisivo de José Tena para los Nationals contra los Guardians han demostrado el valor de la profundidad en los rosters de MLB. En este análisis, repasamos cómo las lesiones modifican dinámicas competitivas, el proceso mental y físico de recuperación de las estrellas, y cómo surgen nuevos héroes en medio del caos.

Royce Lewis: talento atrapado en un ciclo de lesiones

Royce Lewis, la selección número uno del draft de 2017, ha tenido una carrera llena de altibajos físicos. Desde dos cirugías de ligamento cruzado hasta lesiones musculares persistentes, cada intento de resurgir ha sido seguido por otro desliz físico. En 2024, solo pudo disputar 82 partidos por problemas en el cuádriceps e ingle. Este año, una distensión moderada del tendón de la corva izquierda lo dejó fuera por los primeros 35 juegos. "Estoy cansado de ser el tipo que está en la lista de lesionados," confesó Lewis al reincorporarse recientemente a los Twins. Sin embargo, su regreso ha sido recibido con esperanza, tanto por la gerencia como por los aficionados. “Cuando se encienden las luces, él quiere jugar,” declaró el mánager Rocco Baldelli. Minnesota, que perdió 15 de sus primeros 22 juegos de la temporada, busca reactivar su ofensiva con la presencia de Lewis, cuya energía y versatilidad han sido cruciales en el pasado. A sus 24 años, su obsesión ya no es solo destacar, sino mantenerse sobre el terreno: “Tengo que jugar con más inteligencia para poder jugar los 162 juegos.”

Shota Imanaga y la precaución en su primer dolor de corvas

Shota Imanaga llegó a los Chicago Cubs con grandes expectativas tras firmar un contrato de 4 años por 53 millones de dólares. Su 2024 fue impresionante: 15-3 con una efectividad de 2.91 y un lugar en el Juego de Estrellas. Este 2025 comenzó sólido, con marca de 3-2 y ERA de 2.82, hasta que una lesión en el tendón de la corva al cubrir la primera base lo obligó a frenar. “Nunca había tenido una lesión del tren inferior,” explicó Imanaga, de 31 años. Aunque planea mantener su brazo en forma lanzando, no hay estimación clara de su regreso. Cabe recordar que su compañero Justin Steele sufrió la misma lesión a comienzos de 2024 y tardó seis semanas en volver al montículo. Craig Counsell, su mánager, ha sido directo: “Cada lesión es diferente. Solo progresaremos día a día.” El plan de los Cubs apunta a la cautela, considerando que ya tienen una rotación afectada por la ausencia de Steele y Assad.

El juego donde brilló José Tena: la importancia del fondo de plantilla

Mientras algunas estrellas se rehabilitan, otros jugadores aprovechan la oportunidad para brillar. Tal es el caso del dominicano José Tena, quien conectó un doble productor de dos carreras en la séptima entrada que dio la ventaja definitiva a los Nacionales sobre Cleveland por 10-9 en un emocionante juego del 7 de mayo. Con una serie de remontadas propias y ajenas, ese partido demostró que los bancos también ganan juegos. El bullpen de Cleveland vio cómo su ventaja de cuatro carreras desapareció en el mismo inning, y Tena fue quien selló la remontada. Dato curioso: La línea ofensiva del quinto al noveno bateador de los Guardians se combinó para 11 de los 14 hits del equipo en ese juego. El venezolano Jorge López se llevó la victoria y Kyle Finnegan completó su duodécimo salvamento del año.

El cuerpo, factor decisivo en la carrera de un pelotero

El caso de Lewis no es único. Ya lo vivimos con nombres como Fernando Tatís Jr., Byron Buxton o Mike Trout; el cuerpo humano, a pesar de su capacidad, a menudo traiciona al talento. Según un estudio del National Center for Biotechnology Information, alrededor del 30% de los jugadores de la MLB pasan tiempo en la lista de lesionados en una temporada promedio. Desde 2019, ha habido un aumento en las lesiones de tejidos blandos como distensiones musculares y tirones de corvas, posiblemente debido a entrenamientos más intensos fuera de temporada o condiciones de juego más estrictas (como el reloj de pitcheo implementado).

Los equipos se adaptan: rotaciones y estrategias

La profundidad en el roster es hoy más importante que nunca. Los Cubs están considerando opciones como Cade Horton y Chris Flexen para cubrir el espacio dejado por Imanaga. Las franquicias no solo necesitan estrellas saludables sino también buenos reemplazos. Hay también un enfoque creciente en la ciencia deportiva. Muchos cuerpos técnicos ahora utilizan software de seguimiento de carga de trabajo, como Statcast o sistemas GPS en entrenamientos para predecir patrones de fatiga. Probablemente aún estamos rascando la superficie de lo que la medicina deportiva aportará al béisbol del futuro.

Frustración, resiliencia y mentalidad

Más allá del físico, las lesiones golpean fuerte en el aspecto emocional. Volver de una rotura del ligamento cruzado (como Lewis, dos veces) no solo requiere quirófano, sino una fortaleza mental digna de elogio. Imanaga, por su parte, ha sido ejemplar en su enfoque positivo al buscar consejos de compañeros como Justin Steele. “Para mí es bueno tomarme este tiempo, reflexionar sobre lo que necesito mejorar en la preparación previa al juego,” dijo el japonés. Es en esa mentalidad donde muchos entrenadores encuentran la clave del éxito a largo plazo. Un jugador que rehúye los caminos fáciles en favor del análisis, la disciplina y la paciencia puede durar más que uno cuya ansiedad lo lleve a saltar etapas.

2025: una temporada en que la salud puede determinar campeones

Con conferencias reñidas y wildcards más abiertas, cualquier desliz físico puede redefinir carreras y postemporadas. Los Twins necesitan a Lewis en plenitud. Los Cubs, sin Imanaga, quedan vulnerables en una rotación ya parchada. Del otro lado, los Nationals encuentran en elementos jóvenes como Tena una razón para soñar. Queda claro: la salud puede no ser el único factor, pero sí uno determinante. En una liga donde los márgenes son mínimos, un tendón de corva o una buena rehabilitación pueden ser la diferencia entre octubre y el olvido.
Este artículo fue redactado con información de Associated Press