¡Fenómeno en la Bahía! Jung Hoo Lee y los 'Hoo Lee Gans' revolucionan a los Giants y a la MLB

La afición de San Francisco da la bienvenida a su estrella coreana con una pasión desbordada que revive la era dorada del equipo

El nacimiento de una leyenda en la Bahía

Cuando Jung Hoo Lee firmó su contrato de seis años por $113 millones con los San Francisco Giants antes de la temporada 2024, pocos esperaban que se convirtiera rápidamente en el alma de la afición. Pero lo que ha sucedido este 2025 va mucho más allá del simple rendimiento en el campo: ha nacido un ídolo, y con él, una pasión colectiva que ha dado vida a uno de los grupos de fanáticos más llamativos de todo el béisbol: los Hoo Lee Gans. Jung Hoo Lee, apodado con cariño “El Nieto del Viento” (en referencia a su padre, Jong Beom Lee, una leyenda en Corea apodada “El Hijo del Viento”) se ha ganado el corazón de los aficionados no solo por su talento sino también por su carisma y energía dentro y fuera del campo.

Cómo comenzó el fenómeno de los Hoo Lee Gans

Todo inició como una simple conversación entre amigos: fanáticos de los Giants deseosos de brindar su apoyo a un jugador que traía consigo no solo talento internacional, sino también una vibra fresca para un equipo que busca volver a los días de gloria. Kyle Smeallie, el organizador del grupo, resume la emoción: “Lo traje a la vida hace poco más de un mes y ha explotado. El recibimiento no solo es increíble en San Francisco, sino en todo el mundo”. La idea creció de manera vertiginosa: camisetas personalizadas con el logo de los Hoo Lee Gans, pelucas de fuego en colores rojo y naranja, cánticos organizados y presencia constante en la tercera grada de Oracle Park. El club de fans ya reúne a más de 200 miembros y cuenta incluso con un sitio web de reclutamiento para nuevos integrantes.

Un héroe digno de una nueva dinastía

La conexión con Jung Hoo Lee ha reavivado una chispa en San Francisco que recuerda a los días de gloria entre 2010 y 2014, cuando los Giants levantaron tres Series Mundiales. En aquella época, los aficionados llevaban gorros de panda en honor al carismático Pablo Sandoval, camisetas de Buster Posey o pelo al estilo de Tim Lincecum. Hoy, esa misma energía se canaliza en cada jonrón de Lee, cada atrapada, cada sonrisa compartida con los fanáticos tras una jugada espectacular. En palabras del propio jugador, a través de su intérprete Joe Han: “Ellos son una gran motivación para mí. Saber que están ahí me impulsa a dar lo mejor cada día en el campo”.

El impacto cultural de Jung Hoo Lee

San Francisco es una ciudad con una amplia comunidad asiática, en particular coreana, y la llegada de Jung Hoo Lee ha sido una oportunidad de oro para reforzar la conexión entre deporte, diversidad y cultura. El club de fanáticos no solo corea su nombre: también organizan cánticos en coreano, diseñan pancartas bilingües y celebran la Noche Coreana en el estadio con entusiasmo desbordante. Este fenómeno no ha pasado desapercibido fuera de Estados Unidos. Seguidores desde Corea del Sur se han comunicado con los Hoo Lee Gans para expresar su agradecimiento, en especial por cómo han adoptado con tanto cariño a uno de sus más preciados atletas. “Él tiene un linaje de grandeza”, afirma Smeallie. “Su padre fue una leyenda, y Jung está escribiendo su propia historia en las grandes ligas. Desde Corea nos escriben agradecidos porque lo sentimos como uno de los nuestros”.

Estadísticas que respaldan el entusiasmo

Más allá del fervor en las gradas, Jung Hoo Lee respalda su popularidad con resultados. En lo que va de la temporada 2025:
  • Batea para .312, liderando a los Giants.
  • Ha conectado 9 jonrones y remolcado 34 carreras.
  • Cuenta con un porcentaje de embasado (OBP) de .389 y un Slugging de .492.
  • Es líder defensivo en el equipo con más de una decena de jugadas destacadas en la pradera central.
Además, su presencia ha elevado el rendimiento colectivo. Los Giants tienen marca de 25 victorias y 18 derrotas, ubicándose tan solo a 2 1/2 juegos de los Dodgers en la División Oeste, considerada la más difícil del béisbol.

Comparaciones inevitables: ¿El nuevo Ichiro?

Cada vez que un jugador asiático brilla en las Grandes Ligas, surgen comparaciones con leyendas anteriores. Para Jung Hoo Lee, es habitual tanto en Corea como en Estados Unidos oír su nombre junto al de Ichiro Suzuki, uno de los mejores bateadores asiáticos en la historia de la MLB. Sin embargo, Lee parece ir construyendo su propia identidad. Ha señalado públicamente su respeto por Ichiro, pero también su deseo de escribir su propio legado. “No quiero ser el próximo Ichiro; quiero ser el primer Jung Hoo Lee”.

¿Por qué es diferente este fenómeno?

A diferencia de otras estrellas internacionales que han llegado a la MLB, el caso de Lee tiene varias particularidades:
  • Autenticidad: No busca ser una marca, sino conectar emocionalmente con los aficionados.
  • Carisma espontáneo: Sus sonrisas, saludo a los niños y actitud positiva lo han acercado a la fanaticada.
  • Apertura cultural: Aprendió frases en español e inglés, interactúa con compañeros latinos y estadounidenses con facilidad.
  • Participación activa: Se ha unido a causas benéficas en la ciudad y realiza clínicas para jóvenes peloteros, incluyendo instructores coreanos.

La comunidad responde: papel social del béisbol

Este movimiento de los Hoo Lee Gans expone una verdad que muchas veces se olvida en medio de estadísticas y contratos millonarios: el béisbol es también identidad y pertenencia. En una época en la que muchos critican la pérdida de conexión entre los equipos y sus seguidores, lo que se vive ahora con Jung Hoo Lee podría considerarse un caso de estudio sobre cómo revivir la pasión por un equipo de manera orgánica, transversal y multicultural. Bob Melvin, mánager de los Giants, lo resume con claridad: “Es genial ver cómo cada día tiene más respaldo. Me recuerda un poco lo que viví en San Diego con Ha-seong Kim, pero aquí es aún más fuerte. Además, ¡Jung es un jugador de primer nivel!”.

El futuro es (Hoo) brillante

Aunque la temporada apenas va a mitad, los números de asistencia y el “merchandising” de los Giants ya muestran el impacto claro de Lee. Las camisetas con su nombre lideran las ventas del equipo, y el área designada como “Jung Hoo Crew” en las gradas se llena durante los fines de semana. La organización de San Francisco ha sabido capitalizar este fenómeno con respeto y orgullo. Lejos de explotarlo, lo han promovido como un ejemplo de integración comunitaria y modelo de impacto positivo. Como lo dijo uno de los aficionados entrevistados: “No es solo béisbol. Es sentirnos parte de algo grande. Sentir que, cuando Jung pisa el campo, todos ganamos”.
Este artículo fue redactado con información de Associated Press