Tommy Tuberville, de entrenador a gobernador: ¿podrá conquistar Alabama otra vez?

El controversial senador y exentrenador de fútbol americano se perfila como favorito para las elecciones a gobernador en 2026, con el respaldo de Trump y una base republicana firme.

La evolución política de Tommy Tuberville

Conocido por su trayectoria como entrenador del equipo de fútbol americano de la Universidad de Auburn, Tommy Tuberville dio un salto inesperado a la política en 2020 cuando se convirtió en senador por Alabama tras derrotar a Jeff Sessions, exfiscal general de EE.UU. y político de larga data en el estado.

Ahora, el político republicano planea otro giro en su carrera: postularse a gobernador de Alabama en 2026. Según fuentes cercanas, Tuberville anunciará oficialmente su candidatura en los próximos días.

De la cancha al Capitolio: ¿quién es Tommy Tuberville?

Nacido en Arkansas, Tuberville saltó a la fama en el deporte universitario. Fue entrenador de fútbol en varias universidades, destacándose durante su etapa en Auburn (1999-2008), donde consiguió importantes victorias dentro de la poderosa SEC (Southeastern Conference), incluso una temporada perfecta en 2004. Se retiró del coaching en 2016, tras dirigir brevemente a la Universidad de Cincinnati.

Su llegada al Senado fue impulsada por el respaldo del entonces presidente Donald Trump. En tiempos de inestabilidad política, Tuberville fue presentado como un “outsider”, un hombre ajeno al mundo burocrático de Washington que entendía al votante común.

Un aliado férreo de Trump y su política

Desde que asumió como senador, Tuberville ha adoptado una agenda ultraconservadora. En 2023, bloqueó durante meses promociones en las Fuerzas Armadas en protesta contra una política del Pentágono que ofrecía apoyo financiero a militares que necesitaran viajar para acceder a abortos legales fuera de sus estados.

Además, ha defendido repetidamente a Donald Trump, incluso diciendo en campaña que “Dios nos envió a Donald Trump”. Su fidelidad al expresidente le ha ganado respaldo dentro del núcleo duro del Partido Republicano y lo perfila como uno de los favoritos para liderar la contienda por la gobernatura.

Alabama: tierra fértil para las políticas conservadoras

El actual gobernador, Kay Ivey, completará su segundo mandato en 2026 y no podrá postularse por restricciones legales. Tuberville, con su fama consolidada, una sólida base de votantes rurales cristianos y el apoyo de PACs influyentes como Club for Growth, ya suena con fuerza como sucesor natural.

Club for Growth PAC declaró esta semana que apoyará oficialmente a Tuberville si decide postularse, elogiando sus políticas fiscales conservadoras y sus posturas en favor de la “libertad escolar” y recortes de impuestos.

¿Un verdadero alabamaense?

Durante sus campañas políticas, Tuberville ha enfrentado críticas relacionadas con su residencia real. En 2018 votó en Florida, y sus detractores lo han acusado de ser un “turista político”. Aunque posee una casa en Auburn valorada en $270,000, también tiene una lujosa propiedad de $4 millones en Walton County, Florida.

La Constitución de Alabama exige que un gobernador haya residido en el estado durante al menos 7 años antes de su elección. Tuberville se registró para votar en Alabama en 2019, apenas cumpliendo ese requisito. Aun así, la percepción de que es más “floridano” que “alabamaense” podría convertirse en una debilidad electoral si los demócratas logran capitalizarla, aunque en un estado tan conservador como Alabama, eso parece poco probable.

Las últimas polémicas políticas: el aborto como campo de batalla

Un aspecto central en la carrera política de Tuberville ha sido su postura extremista en políticas sociales, especialmente relacionadas con los derechos reproductivos. La ley que restringe los viajes para recibir abortos fuera del estado ha sido uno de sus caballos de batalla.

Este tipo de posiciones le aseguran votos entre los conservadores más religiosos, pero podrían alienar a votantes independientes o a republicanos más moderados. De acuerdo con un estudio de Pew Research Center, aunque Alabama es uno de los estados más religiosos del país, el apoyo absoluto a prohibiciones estrictas al aborto ha disminuido ligeramente en ciertos sectores jóvenes del electorado.

La batalla contra los demócratas y otros republicanos

Los demócratas, debilitados desde hace décadas en Alabama, no parecen tener una figura que pueda competir seriamente en la contienda por la gobernación. Desde Doug Jones—quien fue elegido brevemente al Senado en 2017—el partido no ha logrado retomar una posición de poder estatal significativa.

En cambio, dentro del Partido Republicano podrían surgir otros aspirantes: líderes religiosos, representantes estatales e incluso empresarios con aspiraciones políticas. Sin embargo, la figura pública y mediática de Tuberville, junto con su conexión con Trump, le dan una posición aventajada desde el inicio.

¿Un fenómeno nacional o una señal de los tiempos?

La candidatura de Tuberville ilustra una tendencia que ha crecido en Estados Unidos: el ascenso de figuras que vienen del espectáculo, el deporte o la farándula hacia posiciones de poder. Como sucedió con Trump, su fama previa al mundo político genera fidelidad emocional antes que racionalidad política.

Tuberville no es el primero ni será el último en utilizar su celebridad como trampolín electoral. En un entorno de polarización, donde la identidad pesa más que las propuestas, las figuras que logren inspirar y movilizar emociones tienen casi asegurado un lugar en las boletas.

¿Qué está en juego?

La elección a gobernador en 2026 no solo determinará quién lidera un estado profundamente conservador; también servirá de termómetro para las elecciones presidenciales de 2028. Si Tuberville gana y fortalece su imagen como líder efectivo en temas conservadores, podría posicionarse como una figura nacional dentro del Partido Republicano.

En un clima donde gobernadores como Ron DeSantis o Greg Abbott ocupan un rol preponderante en la agenda política estadounidense, Tuberville podría aspirar a “jugar en las grandes ligas” si logra gobernar con éxito desde Montgomery.

De momento, su historia es el retrato de la América actual: un exentrenador deportivo, fanático de Trump, con un discurso nacionalista y conservador, listo para pasar del Senado a la oficina del gobernador. ¿Será este el siguiente capítulo en el auge del populismo conservador en Estados Unidos?

Este artículo fue redactado con información de Associated Press