¿Qué les pasa a los ases? El incierto presente de los brazos élite en Grandes Ligas

Entre la recuperación de Robert Stephenson, el estancamiento de Zac Gallen y la rehabilitación de Shota Imanaga, los ases de la MLB enfrentan un 2025 lleno de desafíos

El arte de lanzar: En la cima, en caída libre o de regreso

En el béisbol moderno, los lanzadores abridores y relevistas de élite son tratados como piedras preciosas: escasos, valiosos y propensos a romperse. El 2025 nos regala historias paralelas de lanzadores que representan distintos puntos en el espectro del rendimiento y la salud. Esta vez nos enfocamos en tres nombres clave que en años recientes han tenido un impacto relevante: Robert Stephenson, Shota Imanaga y Zac Gallen. Tres brazos, tres caminos. ¿Qué podemos aprender del presente de estos ases?

Robert Stephenson: el regreso de una promesa recargada

El relevista de los Los Angeles Angels, Robert Stephenson, por fin está listo para lanzar luego de pasar más de un año fuera de acción tras someterse a una operación en el ligamento colateral cubital del codo en mayo de 2024. El procedimiento incluyó un refuerzo interno, una alternativa al ya conocido TJ (Tommy John), cada vez más común entre los lanzadores de Grandes Ligas.

Firmado por $33 millones y tres años en diciembre de 2023, Stephenson no había podido ver acción con los Angels... hasta ahora. “Honestamente, para mí esto está a la altura de mi debut en Grandes Ligas”, confesó el derecho de 33 años. Esa emoción es comprensible: en 2023, con Tampa Bay Rays, tuvo una ERA de 2.35 en 42 juegos, registrando 60 ponches y apenas 8 bases por bolas en 38.1 innings, números que cualquier equipo soñaría tener en su bullpen.

Y los Angeles lo necesitan. El bullpen del equipo de Anaheim tiene la peor ERA de toda la MLB esta temporada con 6.31, agravado por la pérdida del joven Ben Joyce tras una cirugía de hombro. Los Angels esperan que Stephenson pueda reaprender el ritmo del juego e insertarse en roles de alta presión —quizás como preparador del veterano cerrador Kenley Jansen.

Shota Imanaga: pausa obligada para el as de los Cubs

El zurdo japonés Shota Imanaga fue una de las sensaciones del 2024 en su primera campaña en la MLB: 15-3 con ERA de 2.91 y uno de los candidatos al Novato del Año de la Liga Nacional. Los Cubs creyeron en él y le firmaron un contrato por $53 millones a cuatro años.

Pero el 2025 no ha sido tan amable. Luego de un buen arranque (3-2 y ERA de 2.82 en ocho aperturas), sufrió una lesión en el tendón de la corva que lo ha tenido fuera de acción desde principios de mayo. Afortunadamente, Imanaga ha retomado su rutina lanzando desde el bullpen, corriendo y practicando jugadas defensivas, según informó el manager Craig Counsell.

Fue un muy buen día de trabajo”, dijo Counsell tras la sesión más reciente. Imanaga viajará a las instalaciones de entrenamiento de los Cubs en Mesa, Arizona, en los próximos días. El plan es que evolucione hacia juegos simulados o apariciones de rehabilitación según su tolerancia al esfuerzo.

El impacto de su ausencia no es menor: los Cubs han tenido una rotación inconsistente y perdieron paso en la muy competitiva División Central de la Nacional. El regreso del japonés podría representar un impulso crítico en la carrera por el comodín.

Zac Gallen: el ace que enfrenta su propia niebla

Quizás el caso más llamativo es el de Zac Gallen, lanzador estelar de los Arizona Diamondbacks, quien fue uno de los pilares del equipo incluso en momentos difíciles durante los últimos tres años.

Gallen ha sido regularmente mencionado en la discusión por el Cy Young: tercero en 2023, con récords de 17, 12 y 13 victorias en sus últimas tres temporadas. Pero el 2025 lo tiene mentalmente atorado.

Actualmente registra un récord de 3-7 con ERA de 5.54 —camino a ser la más alta de su carrera por amplio margen—, y en sus últimas cuatro aperturas ha concedido 19 carreras limpias en solo 22 innings. Su principal flagelo: las bases por bola. Acumula ya 32 pasaportes esta temporada, con una tasa de 4.2 BB/9 —superior a su media de carrera de 2.9.

Estoy tratando de ubicar la bola, y hay lanzamientos que simplemente se me van al otro lado del plato”, dijo el propio Gallen. La frustración es evidente. Contra los Pirates, por ejemplo, sus tres boletos fueron para iniciar inning, y todos terminaron anotando, un patrón peligroso.

¿Qué tienen en común estos tres lanzadores?

Cada uno vive una etapa distinta, pero reveladora en cuanto a la fragilidad del brazo humano lanzando a 150 km/h:

  • Robert Stephenson representa la esperanza de volver tras una seria cirugía. Su mezcla de recta de 97 mph, slider cortante y splitter venenoso lo hace un comodín ideal para un bullpen roto como el de los Angels.
  • Shota Imanaga encarna la pausa forzada en una carrera ascendente. El drama aquí es si podrá retomar su nivel antes de que la temporada avance más en Chicago.
  • Zac Gallen es el espejo del desgaste: un as que ya acumula temporadas intensas y ahora lucha con el control, posiblemente como efecto acumulativo de su carga laboral.

Datos duros del declive y la recuperación de lanzadores

Históricamente, alrededor del 25% de los pitchers de MLB han tenido Tommy John u otro tipo de cirugía de codo. En 2023, hubo un récord de 31 pitchers sometidos a esa cirugía en Grandes Ligas, según datos de Baseball Prospectus.

El caso de Stephenson entra en la nueva tendencia: bracing interno en lugar de reemplazo ligamentoso completo, lo cual permite una recuperación más rápida pero aún está en fase de estudio a largo plazo.

En contraste, el caso de Gallen muestra cómo el rendimiento puede decaer por factores multifactoriales: carga de lanzamientos, estrés competitivo e incluso presión psicológica. A pesar de ello, los técnicos creen que puede retornar.

El futuro inmediato

Los Angels, Cubs y Diamondbacks son tres equipos con aspiraciones reales de playoffs. Para lograrlo, sus lanzadores clave deben estar en su mejor forma:

  • En Anaheim, Stephenson podría convertirse en una pieza crítica que altere un bullpen golpeado.
  • En Chicago, Imanaga es parte de una rotación que necesita consistencia urgentemente.
  • En Arizona, Gallen debe reencontrar su comando para brindar estabilidad a un equipo en caída libre.

El 2025 será una prueba de fuego para estos ases. Ya sea saliendo de la oscuridad tras una cirugía, luchando contra una lesión reciente o peleando con la confianza perdida, cada uno representa la dimensión humana del béisbol profesional: talento, resiliencia e incertidumbre constante.

Y como siempre en este deporte: el brazo habla. Solo hay que escuchar el mensaje, ya sea un rugido... o un susurro.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press