PSG arrasa en la final de la Champions y desata una fiesta explosiva en París
Con un 5-0 histórico sobre el Inter de Milán, Paris Saint-Germain gana su primera Liga de Campeones y convierte la ciudad en un carnaval azul y rojo marcado por euforia... y disturbios
En una noche que muchos parisinos esperaron durante décadas, el Paris Saint-Germain (PSG) finalmente conquistó su primera Liga de Campeones de la UEFA con una contundente victoria 5-0 sobre el Inter de Milán. El evento, celebrado en el Allianz Arena de Múnich, no solo fue glorioso dentro del campo de juego, sino que también encendió las calles de París... de manera literal.
Un resultado histórico
Desde el pitazo inicial, el PSG fue claramente superior a su rival italiano. Los goles cayeron uno tras otro: Achraf Hakimi, en una poética revancha frente a su ex equipo; Désiré Doué con un doblete deslumbrante; Khvicha Kvaratskhelia y Senny Mayulu sellaron el marcador final con una contundencia sin precedentes.
Este 5-0 se convirtió en la mayor diferencia de goles en una final de Copa de Europa/Liga de Campeones desde la creación del torneo en 1955.
"No tengo palabras. Lo único que puedo decir es 'Gracias, París'. ¡Lo logramos!", dijo Doué, el héroe inesperado de la noche, a la cadena Canal+.
Una explosión de emociones… y caos
Como era de esperar, la capital francesa estalló de júbilo. Miles de fanáticos se volcaron en las calles para celebrar el histórico título. La Torre Eiffel brilló en azul y rojo, mientras flares, bengalas y fuegos artificiales coloreaban el cielo sobre el Champs-Élysées y la Place de la Bastille.
Sin embargo, la fiesta dio paso al caos cuando grupos de aficionados encendieron enfrentamientos con la policía antidisturbios. Según informes oficiales, se realizaron 131 arrestos, dos autos fueron incendiados, y se reportaron ataques a establecimientos comerciales, incluido un saqueo masivo en una tienda de calzado.
Ya cerca de la medianoche, agentes de seguridad lanzaron gas lacrimógeno y utilizaron cañones de agua para dispersar a las multitudes en la Place de l’Étoile, donde algunos hinchas intentaron romper las barreras y avanzar hacia la policía.
“Celebremos, pero sin romper todo París”, suplicó Ousmane Dembélé en declaraciones a Canal Plus después de la final.
Una mancha en la celebración perfecta
Las autoridades desplegaron un operativo masivo de 5.400 policías por toda la ciudad en previsión de disturbios, especialmente debido a los antecedentes del equipo y sus seguidores en eventos similares:
- En 2020, tras perder contra Bayern en la final de Lisboa, los fans de PSG protagonizaron violentos enfrentamientos con la policía.
- Durante la celebración del título de liga en 2013, más de 30 personas resultaron heridas en disturbios.
- Triunfos y enfrentamientos en torneos como la Copa Africana de Naciones (2019) y el Mundial (2022) también derivaron en enfrentamientos en el Champs-Élysées.
El dispositivo de seguridad en esta ocasión no fue suficiente para contener el aluvión emocional tras el histórico título.
El mártir: Inter de Milán
Para el Inter de Milán, la derrota fue dolorosa. Venían de una gesta heroica frente al Barcelona, donde remontaron en una serie inolvidable de 7-6. Pero ante PSG, no hubo lugar ni para la épica ni para el orgullo. Sufrieron su segunda derrota en una final europea en tres años (la última fue frente a Manchester City en 2023).
“Lo que queda es la imagen final... y eso borra un poco todo lo que hemos hecho”, dijo un visiblemente afectado Nicolò Barella.
Inter se mostró apático, impreciso, nervioso. Yann Sommer, arquero titular, cometió errores impropios de su categoría, y los jugadores parecían sobrepasados desde el minuto 1. Marcus Thuram fue uno de los pocos que ofreció destellos, pero sin éxito.
Una dinastía que inicia
Después de numerosas temporadas intentándolo, PSG finalmente alzó "La Orejona". Con su triunfo, el club francés se une al selecto grupo de campeones europeos, y lo hace con un marcador que será parte de la historia.
La inversión multimillonaria del club en la última década —cercana a los 2.000 millones de euros en fichajes, según Transfermarkt— ha sido motivo de críticas y burlas por no haber obtenido resultados europeos. Ahora, ese gasto se justifica para la afición.
“Hoy fueron mejores en todo: táctica, determinación... debemos felicitar a nuestros rivales”, reconoció Barella con amargura.
Futuro brillante o advertencia feroz
El desafío ahora para PSG es sostener esta gloria. El fútbol europeo es volátil. Que se lo digan al Chelsea campeón en 2021, que al año siguiente no pasó de cuartos.
La advertencia también está en casa: el club debe enmendar su relación con su base de hinchas, muchos de los cuales —pese al fervor— critican la falta de identidad francesa en el plantel y el protagonismo total de estrellas extranjeras.
Pero, por esta noche, París es feliz. Y eso vale oro.