Andrew McCutchen y su legado entre leyendas: ¿el último gran ídolo de los Piratas de Pittsburgh?

A los 38 años, McCutchen iguala a Roberto Clemente en jonrones y revive la historia de una franquicia forjada por leyendas.

Andrew McCutchen está viviendo un renacimiento con los Piratas de Pittsburgh, y no solo como un veterano experimentado en su equipo, sino como un nombre que ahora se menciona junto a una de las figuras más queridas en la historia del béisbol: Roberto Clemente.

El pasado 1 de junio de 2025, McCutchen conectó el jonrón número 240 de su carrera con los Piratas, empatando con Clemente en el tercer lugar de la lista histórica de cuadrangulares de la franquicia. Fue un batazo de dos carreras frente a Randy Vásquez de los Padres de San Diego. Un momento simbólico, cargado de historia y resonancia emocional para la afición y para aquellos que han seguido de cerca su carrera.

Un recorrido de grandeza entre dos íconos

Roberto Clemente jugó toda su carrera, entre 1955 y 1972, con los Piratas. Además de sus 240 jonrones, ganó cuatro títulos de bateo, 12 Guantes de Oro y fue elegido MVP de la Liga Nacional en 1966. Su legado trasciende el campo: fue reconocido por su activismo comunitario, algo que le costó la vida el 31 de diciembre de 1972, al estrellarse su avión mientras transportaba ayuda humanitaria a Nicaragua.

En contraste, Andrew McCutchen ha sido una figura moderna que, aunque ha recorrido otras franquicias como los Phillies, Giants, Brewers y Yankees, ha sido identificado con los Piratas. McCutchen fue el MVP de la Liga Nacional en 2013, cinco veces All-Star y una voz de liderazgo dentro y fuera del campo.

“He tenido una carrera bendecida y regresar a Pittsburgh ha sido un círculo completo para mí. Igualar a Clemente es un honor inmenso,” declaró McCutchen tras su hazaña.

Las leyendas ofensivas de los Piratas

La historia del bateo en los Piratas tiene nombres que resuenan con fuerza:

  • Willie Stargell: 475 cuadrangulares
  • Ralph Kiner: 301 cuadrangulares
  • Roberto Clemente: 240 cuadrangulares
  • Andrew McCutchen: 240 cuadrangulares (y contando)

El hecho de que McCutchen haya alcanzado esta marca en su temporada número 17 y a los 38 años habla no solo de longevidad, sino también de consistencia. En una época donde las sabermetrías redefinen el valor ofensivo, McCutchen ha sabido mantenerse relevante con una mezcla de disciplina, poder situacional y experiencia.

El impacto emocional del regreso a casa

Cuando McCutchen regresó a los Piratas en 2023, fue recibido como un hijo pródigo. La franquicia, que tenía años sin rumbo claro, encontró en su regreso no solo una pieza productiva, sino una figura que reconstruyó el puente entre el pasado glorioso y el presente esperanzador.

“No se trataba solamente de números. Se trataba de legado, de comunidad, de pasión... y de Pittsburgh,” dijo el manager Derek Shelton tras el histórico cuadrangular.

¿Es McCutchen el último ídolo de una era?

En los últimos años, la figura del ídolo de una sola franquicia se ha vuelto cada vez menos común. McCutchen tuvo pasos por otros equipos, pero su huella más profunda ha sido en Pittsburgh. En una liga cada vez más movida por contratos cortos y agentes libres, su conexión emocional con los Piratas es excepcional.

Además, su liderazgo ha sido vital para jóvenes como Ke’Bryan Hayes y Oneil Cruz, que lo consideran un mentor dentro y fuera del campo:

“Aprendemos de él todos los días. No solo cómo se entrena, sino cómo representa a esta ciudad,” comentó Hayes.

El simbolismo de igualar a Clemente

Inevitablemente, igualar a Clemente en homeruns genera comparaciones. Pero hay que dejarlas de lado. Clemente fue un ícono más allá del béisbol. Fue declarado Héroe Nacional de Puerto Rico, ha sido honrado con premios en su nombre y su número 21 es sinónimo de altruismo y servicio.

McCutchen lo sabe, y por eso afronta el logro con respeto y humildad. Su gesto tras el jonrón, señalando al cielo, parecía una dedicatoria al cielo beisbolero donde Clemente, sin duda, forma parte de una constelación de inmortales.

Una carrera más allá de los números

Andrew McCutchen ha sumado hasta ahora:

  • 324 cuadrangulares en total (en todas las franquicias)
  • Más de 2,000 hits
  • Más de 1,000 carreras impulsadas
  • Más de 200 bases robadas

Pero más allá de los números, ha sido un emblema del béisbol decente, carismático y comprometido. Ha promovido activamente la participación afroamericana en el deporte e incluso ha sido vocero de causas sociales.

El futuro y el legado

Con esta campaña de 2025 en marcha, y con cinco cuadrangulares ya en su haber, McCutchen tiene el claro objetivo de superar los 240 de Clemente y quizás acercarse—dentro de lo razonable—al segundo lugar de Ralph Kiner (301). Pero más allá del segundo o tercer lugar histórico, lo que cuenta es la historia que deja escrita en el corazón de Pittsburgh.

Faltará mucho, tal vez décadas, para que otro jugador vista con tanto orgullo los colores de los Bucaneros y represente sus valores dentro y fuera del diamante. Y cuando eso ocurra, el modelo a seguir estará claro: Andrew McCutchen.

Un merecido lugar en la historia

¿Merece McCutchen el Salón de la Fama? Esa será una discusión para dentro de unos años. Pero si el mérito incluye liderazgo, impacto social, duración y logros individuales, sin duda que tiene argumentos suficientes.

Por ahora, queda disfrutar de su swing pausado pero potente, de su sonrisa que contagia y de su capacidad de conectar con la comunidad. En una era donde el béisbol cambia constantemente, McCutchen nos recuerda por qué este deporte está tan profundamente entrelazado con la emoción, la memoria y el alma de sus fanáticos.

Roberto Clemente estaría orgulloso de ver quién ha tomado su estandarte. No para reemplazarlo, sino para continuar una historia de honor, entrega y amor por el juego.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press