Rearme británico: el Reino Unido se prepara para una nueva era militar
Con el mayor aumento en gasto de defensa desde la Guerra Fría, el Reino Unido planea enfrentar amenazas rusas y ciberataques con un ambicioso plan de rearme y modernización
El Reino Unido se encuentra en una encrucijada estratégica: tras décadas de recortes y reestructuraciones en sus fuerzas armadas, el país planea llevar a cabo el mayor aumento del gasto en defensa desde el final de la Guerra Fría. Las palabras del secretario de Defensa británico, John Healey, no dejaron lugar a dudas: "Este es un mensaje para Moscú".
Un récord histórico en inversión militar
Healey anunció que el Reino Unido está encaminado a alcanzar un gasto en defensa del 2,5% del ingreso nacional bruto (INB) para 2027, lo que representa un incremento cercano a los 13 mil millones de libras anuales (unos 17 mil millones de dólares). Si se cumplen sus palabras, este porcentaje podría ascender al 3% en la próxima década, específicamente durante el siguiente parlamento, en la década de 2030. Estas cifras colocan al país en la élite de la OTAN en cuanto a compromiso económico con la seguridad.
Esta estrategia de rearme responde directamente a la invasión rusa a Ucrania en 2022, que obligó a muchos miembros de la OTAN a repensar sus prioridades geopolíticas. Ya no se trata solo de mantener la paz, sino de prepararse activamente para disuadir e, incluso, reaccionar ante potenciales conflictos que amenacen la seguridad europea.
Los números detrás de la defensa
- La cifra anual de gasto extra: £13 mil millones
- Meta para 2027: 2,5% del INB en defensa
- Objetivo para 2030s: 3% del INB
- Inversión futura en municiones: £6 mil millones
- Cibataques recibidos en dos años: más de 90,000
Una respuesta tecnológica y estratégica
No solo se está considerando aumentar la cantidad de tropas (actualmente en niveles históricamente bajos), sino que también se apuesta por una reestructuración tecnológica e industrial. Como destacó Healey, el enfoque también está en reforzar la base industrial militar británica.
Durante una visita a la fábrica de misiles Storm Shadow, el ministro anunció planes para adquirir hasta 7,000 armas de largo alcance de fabricación británica. Esta medida consolidaría la autonomía bélica del país y generará empleo en diferentes regiones del Reino Unido. Además, este esfuerzo se complementa con una prometida inversión de £6 mil millones en producción de municiones durante cinco años.
¿Qué es el misil Storm Shadow?
Desarrollado por MBDA, el Storm Shadow es un misil crucero de largo alcance altamente preciso. Con un alcance de más de 250 kilómetros y capacidad para evadir radares enemigos, ha sido utilizado con éxito por la RAF en conflictos como el de Siria e Irak. Su adquisición masiva es una señal clara de preparación ante conflictos de alta intensidad.
La amenaza invisible: ciberataques
Healey también alertó sobre una constante y silenciosa guerra híbrida que se desarrolla en internet. Aseguró que el Reino Unido ha sido víctima de aproximadamente 90,000 ciberataques provenientes de actores estatales durante los últimos dos años, la mayoría atribuibles a la inteligencia rusa.
Como respuesta, el gobierno británico planea implementar un Comando Cibernético especializado para contrarrestar estas amenazas. El objetivo es claro: prepararse para la guerra para garantizar la paz. La anticipación y preparación tecnológica serán claves para combatir ataques en una era donde las fronteras físicas ya no son el único frente de batalla.
Las tensiones en la OTAN y el factor Trump
Esta iniciativa militar ocurre en paralelo a las tensiones internas dentro de la OTAN, exacerbadas por los comentarios del expresidente estadounidense Donald Trump, quien desde hace años presiona a los miembros europeos para que asuman mayor responsabilidad financiera en defensa.
Trump ha mostrado escepticismo respecto al papel de Estados Unidos dentro de la OTAN. Afirmó incluso que no defendería a los países que no invierten lo suficiente, una postura que ha redefinido la estrategia de muchos socios europeos, que ahora actúan con mayor autonomía. En este contexto, tanto el Reino Unido como Francia han tomado el liderazgo en la consolidación de la defensa europea.
La revisión estratégica de defensa: un nuevo paradigma
El lunes se dará a conocer una esperada Revisión Estratégica de Defensa, un documento elaborado bajo la dirección de Lord George Robertson, importante figura del Partido Laborista y exsecretario general de la OTAN. Healey aseguró que será la más importante desde el colapso de la Unión Soviética en los años 90.
Este análisis incluirá propuestas concretas para el refuerzo no solo del poder militar tradicional, sino también en ámbitos como la guerra cibernética, la protección de infraestructuras críticas y la modernización de estructuras militares obsoletas. Se espera que marque un antes y un después en la política de defensa del país.
Críticas de la oposición: ¿Es suficiente?
Robert Jenrick, portavoz de justicia del Partido Conservador, aplaudió el aumento de presupuesto, pero criticó el calendario. Calificó como inadecuado esperar hasta 2034 para alcanzar el 3% del PIB en defensa.
“Creemos que 2034 es demasiado tarde, dada la gravedad del momento actual”, dijo en una entrevista con Sky News, añadiendo que el Reino Unido debería aspirar al 3% dentro del actual parlamento que se extiende hasta 2029.
Defensa en cifras globales
Según los datos de la OTAN de 2024:
- Solo 11 de los 32 miembros de la OTAN cumplen con el gasto mínimo del 2% del PIB
- Estados Unidos lidera con un 3,5% del PIB en gasto militar
- Reino Unido se encontraba en un 2,2% antes del anuncio de Healey
- Polonia, Finlandia y Estonia han superado recientemente el 2% debido a amenazas percibidas del este
El poder militar británico en números (2025)
- Personal activo: aproximadamente 147,000 (el nivel más bajo desde 1900)
- Tanques principales: 227 (modelo Challenger 2)
- Portaaviones activos: 2 (HMS Queen Elizabeth y HMS Prince of Wales)
- Submarinos con capacidad nuclear: 4 (clase Vanguard)
- Misiles Storm Shadow encargados: 7,000
Una carrera armamentista en ciernes
Que el Reino Unido aumente de forma tan decidida su gasto militar podría desencadenar una especie de carrera armamentista en Europa occidental, donde potencias regionales como Alemania y Francia ya están planteando aumentos similares.
Además, el regreso potencial de Donald Trump a la presidencia de EE.UU. provocaría una política exterior menos comprometida con Europa, lo que obligará a los países del viejo continente a fortalecer sus capacidades defensivas sin depender tanto del escudo estadounidense.
Mirando al futuro
Es un hecho: estamos regresando a un paradigma donde la fuerza militar vuelve a ser un pilar imprescindible de la soberanía nacional. Ya no basta con diplomacia, sanciones o advertencias. En este nuevo tablero internacional, los países se están preparando no solo para disuadir, sino también para actuar.
El Reino Unido busca recuperar su rol histórico como potencia militar relevante. El mensaje enviado a Moscú, pero también a Bruselas y Washington, es claro: Gran Bretaña está lista para defender su seguridad y la de sus aliados, ya sea en el campo de batalla tradicional o en las trincheras digitales modernas.