¿Se hunden los Braves de Atlanta? Una mirada a su temporada en caída libre

Por años, los Braves de Atlanta fueron sinónimo de consistencia en la MLB. Desde 2018 hasta 2023, hicieron de los playoffs su segundo hogar, ganaron cinco títulos divisionales consecutivos e incluso se coronaron campeones de la Serie Mundial en 2021. Pero el 2025 pinta muy distinto. Con dos rachas de siete derrotas consecutivas, errores desde el bullpen y preocupaciones en su rotación estelar, el presente de los Braves preocupa hasta al fanático más optimista.

Un inicio de temporada desastroso

Atlanta abrió su campaña 2025 con un doloroso 0-7, el tipo de comienzo que pone en duda los pronósticos de pretemporada. Sin embargo, lograron rehacerse parcialmente, batallando por seis semanas hasta alcanzar un equilibrado .500, dejando señales de esperanza. Pero todo ese progreso se ha evaporado tras perder nuevamente siete juegos consecutivos, la mayoría por márgenes mínimos, lo cual añade frustración al diagnóstico.

Otra racha de siete derrotas consecutivas

La reciente derrota dominical 4-3 ante los Giants de San Francisco fue simbólica. Con ella, Atlanta cayó a 10 juegos bajo el .500 y se posicionó a 9.5 juegos del último comodín de la Liga Nacional. Aunque matemáticamente siguen vivos, la tendencia no es alentadora. Los Braves no han estado fuera de la postemporada desde 2017, pero 2025 empieza a parecer un año de reinicio forzado.

Los números que duelen

• Récord general: 29-39
• Récord en juegos de una carrera: 9-19
• Blown saves vs saves: 12 blown saves, 10 saves
• Diferencial de carreras: Positivo (+13 hasta el 9 de junio)

Lo más irónico es ese diferencial de carreras positivo. Esto indica que, si bien han perdido muchos juegos, las derrotas han sido cerradas. Han perdido cinco de sus últimos siete juegos por solo una carrera, lo que refleja debilidad táctica y falta de ejecución en momentos clave, más que una deficiencia estructural catastrófica.

El colapso ante Arizona: un síntoma grave

El ejemplo más alarmante de la fragilidad actual se dio en casa ante los Diamondbacks el jueves. Un partido manejado con comodidad terminó en desastre cuando Arizona anotó siete carreras en la novena entrada para remontar y ganar 11-10. Según Baseball Savant, antes del primer out del inning Atlanta tenía un 99.9% de probabilidades de ganar.

"Nunca había visto un colapso tan inexplicable en nuestro estadio. Fue como una pesadilla despierta", comentó un aficionado en el Truist Park.

Un bullpen que no sostiene ventajas

Los relevistas han sido un dolor de cabeza. La reincorporación del veterano Craig Kimbrel, el líder histórico en salvamentos del club, parecía una solución nostálgica pero arriesgada. Tras una única aparición, fue designado para asignación, cerrando con amargura su breve regreso.

¿Qué pasa con los estelares?

En 2024, los Braves resistieron sin Ronald Acuña Jr. y Spencer Strider, ambos lesionados por tramos largos. Ahora que están de vuelta, los resultados siguen sin llegar.

• Ronald Acuña Jr.: Rendimiento ofensivo sólido, pero sin el impacto avasallador de campañas anteriores.
• Spencer Strider: Ha perdido sus cinco aperturas este año. Su efectividad está por las nubes y su velocidad ha bajado varias millas por hora.

Parte del declive puede vincularse a lesiones residuales o incluso a fatiga acumulada. Strider, quien fue pieza clave en el éxito anterior del equipo, ha lucido más vulnerable que nunca.

Situación en la división y el comodín

La NL Este no perdona. A principios de junio de 2025, los Braves están a 14 juegos del liderazgo divisional, comandado por unos renovados Mets de Nueva York. En lugar de competir por la cima, Atlanta se encuentra en cuarto lugar, tan cerca de los últimos Marlins como de los Nationals.

¿Solo mala suerte?

Vale la pena preguntarse si lo de Atlanta es más mental que físico. Su récord en juegos apretados sugiere un colapso en la ejecución más que una falta total de talento.

“No se trata solo de talento. Se trata de situaciones. Ganar un juego ajustado requiere nervios de acero, visión táctica y química. Atlanta luce débil en esas tres áreas”, opina Harold Reynolds en MLB Network.

El entorno tampoco ayuda

Lesiones clave también han afectado la profundidad del roster. Si bien Acuña y Strider volvieron, otros como Austin Riley y Michael Harris II han lidiado con dolencias pequeñas pero constantes. El lineup ha sido inconsistente y el cuerpo técnico parece incapaz de reconectar al equipo.

¿Qué se puede salvar?

Por increíble que parezca, los Braves todavía tienen razones para mantener la esperanza:

• Diferencial de carreras positivo: sugiere que no están siendo dominados.
• Potencial ofensivo intacto: Acuña, Olson, Albies aún pueden despegar.
• Historia reciente: ya remontaron una situación similar (aunque no tan grave) en 2021.

Factores externos: casos curiosos en la liga

Mientras tanto, otros equipos tienen historias opuestas. Los Diamondbacks protagonizaron la remontada de la semana, superando una desventaja de seis carreras en el noveno inning con múltiples hits de Gurriel Jr., Alek Thomas y Eugenio Suárez. Fue la derrota que cerró la sombría semana de Atlanta.

Trivias y marcas históricas: Alonso busca el trono de los Mets

En el contexto del caos Brave, Pete Alonso está a solo diez cuadrangulares de superar a Darryl Strawberry como el líder en jonrones en la historia de los Mets, con 253 hasta la fecha. Solo tres jugadores activos tienen el récord de HR de sus equipos:

• Mike Trout, Angels – 388 HR
• Giancarlo Stanton, Marlins – 267 HR
• Manny Machado, Padres – 177 HR

El contraste con los Braves es notorio: mientras algunos equipos celebran marcas individuales y repuntes impresionantes, Atlanta naufraga en inconsistencias.

¿Y ahora qué?

La temporada de la MLB es larga, pero el margen de error de Atlanta ya es prácticamente cero. Cada serie, cada inning, cada decisión de Snitker desde el dugout cuenta como si estuviéramos en octubre. El talento existe. El tiempo, quizá no.

Si los Braves no cortan esta tendencia pronto, el 2025 será recordado no como un simple "bache", sino como un derrumbe generacional. Y en una franquicia acostumbrada al éxito reciente... eso dolería más que cualquier derrota por una carrera.