Rockies, Orioles y Padres: Tres historias muy distintas en la temporada 2024 de la MLB
Una mirada profunda a tres franquicias con destinos muy distintos — unos hundidos, otros en reconstrucción y los demás en plena batalla
La temporada 2024 de las Grandes Ligas ha traído dramas, desilusiones y promesas para varias franquicias. Hoy nos enfocamos en tres historias muy distintas que, aunque se cruzan en la tabla de clasificación, reflejan las realidades contrastantes de la MLB moderna: los Colorado Rockies, los Baltimore Orioles y los San Diego Padres.
Rockies de Colorado: Una temporada para el olvido
Los Rockies ostentan el peor récord en la MLB con apenas 13 victorias y 57 derrotas, incluido un espantoso 6-30 en la carretera. Su balance los ha dejado no solo al fondo del Oeste de la Liga Nacional, sino también con una posición histórica: el peor arranque de 70 partidos en la era moderna del béisbol desde 1900. Un récord aterrador que evidencia una crisis estructural.
La falta de profundidad en el cuerpo de lanzadores —con una ERA de 6.55 en los últimos 10 partidos— y la ineficacia a la ofensiva, salvo destellos de Hunter Goodman y Jordan Beck, han dejado al equipo virtualmente eliminado antes del All-Star Weekend. A esto se suma una larga lista de lesionados —más de seis lanzadores en la lista de lesionados de 60 días, incluyendo a Austin Gomber y Jeff Criswell— que ha truncado cualquier intento de reconstrucción en tiempo real.
Los Rockies necesitan algo más que prospects: necesitan una revisión institucional profunda, desde la gerencia hasta el desarrollo de talento. ¿El problema? Están atrapados en un ciclo sin fin donde nunca llegan al "fondo político del pozo", porque cada año encuentran una forma de hundirse aún más (sí, incluso por debajo de los A’s de Oakland en algún momento).
Orioles de Baltimore: Una reconstrucción que empieza a dar frutos
Aunque los Orioles tienen un récord negativo (29-40), se encuentran en una etapa distinta: una reconstrucción que parece tener cimientos sólidos. Con jóvenes talentos como Cedric Mullins (11 HR, .462 SLG) y Adley Rutschman (.333 en los últimos 10 juegos), además de una buena base de lanzadores saludables a futuro (aunque hoy están muy mermados por las lesiones), Baltimore se sigue posicionando como un equipo de proyección.
No todo es negativo: los Orioles son séptimos en la Liga Americana en cuadrangulares (78 HR) y solo están a unas piezas clave de la competencia real en el Este de la Americana, quizás la división más compleja en todo el béisbol. El mánager Brandon Hyde ha demostrado saber manejar talento joven, aunque aún carece de veteranos que consoliden el clubhouse en momentos clave.
El enfrentamiento contra los Los Angeles Angels ha sido positivo: una ventaja de 4-1 en el enfrentamiento directo en 2024, con victorias ajustadas y remontadas emocionantes (Mullins y Sánchez con HR consecutivos en una victoria por 6-5). Con una rotación joven liderada hoy por Cade Povich, los Orioles prometen en el mediano plazo, aún cuando este año no sea el de su consagración definitiva.
Padres de San Diego: Entre expectativas y frustraciones
San Diego es quizás el caso más intrigante. Con un récord de 38-31, pelean en una difícil división Oeste de la Nacional. El equipo tiene a superestrellas como Fernando Tatis Jr., Manny Machado y sólidos lanzadores como Nick Pivetta (6-2, ERA de 3.48), pero los resultados no han estado completamente alineados con el talento que poseen. ¡Y mucho menos con el presupuesto que manejan!
Después de una temporada 2023 de decepción tras altas expectativas, los Padres volvieron en 2024 con sed de revancha. Sin embargo, han tenido problemas de consistencia, sobre todo en su pitcheo secundario y en el bullpen. Una racha reciente de 3 derrotas consecutivas ante rivales directos como los Diamondbacks (36-34) enciende las alarmas.
El partido más reciente, una derrota ante Arizona por 8-7 luego de un rally en la novena entrada —gracias a un triple con bases llenas de Geraldo Perdomo— resume la frustración de una campaña llena de altibajos: talento hay, pero el temple en los momentos claves sigue sin aparecer.
¿Qué nos dice esto de la MLB actual?
Estas tres franquicias ejemplifican los extremos del béisbol moderno:
- Rockies: una franquicia estancada, sin rumbo claro, y en camino a una reestructuración que necesita una cirugía de cuerpo entero.
- Orioles: jóvenes y hambrientos, prometen ser contendientes pronto si logran mantenerse sanos y reforzar posiciones claves.
- Padres: armados hasta los dientes, pero con presión financiera y mediática que puede explotar si no logran un recorrido profundo en playoffs.
El béisbol recomienda paciencia con los genes jóvenes, castiga a quienes dependen solo de chequeras, y entierra a los que se niegan a hacer cambios profundos. La temporada 2024 podría ser recordada como la que reveló los verdaderos cimientos de estas franquicias más allá del box score.
Como dijo el legendario Branch Rickey —el creador del sistema de granjas y quien firmó a Jackie Robinson—: "Las victorias tienen una póliza de seguros llamada planificación". Quizás por ahora, los Orioles son los únicos que están leyendo su letra chica con atención.