Caos, caídas y promesas perdidas: el desfase entre expectativas y realidades de los Rockies, Nationals, Orioles y Yankees en 2024

Un vistazo crudo y necesario a cuatro franquicias en crisis (o casi), entre colapsos ofensivos, lesiones devastadoras y frustraciones en la lucha divisional

Una temporada sin rumbo para varias franquicias históricas

En junio de 2024, con la primera mitad de la temporada de MLB ya perfilando favoritos y decepciones, hay historias que parecen sacadas de una pesadilla para algunos fanáticos: los Colorado Rockies tocan fondo, los Washington Nationals rompen récords negativos, los Baltimore Orioles apenas flotan, y los New York Yankees, con todo su poderío, sufren una desconexión ofensiva alarmante. ¿Qué tienen en común estas cuatro franquicias? Más de lo que parece.

Rockies de Colorado: cuando perder se vuelve la norma

Los Rockies, con un lamentable récord de 17-57, han quedado cerca de igualar marcas históricamente infames dentro de las Grandes Ligas. Con solo 10 victorias en carretera y una efectividad colectiva que supera los 6.20, parece que están jugando para asegurar el primer pick del siguiente draft. Su única chispa en las últimas semanas viene de Hunter Goodman, quien acumula 14 home runs; sin embargo, el resto del roster sigue estancado en una ineficiencia ofensiva extrema.

El dato más revelador: los Rockies han sido superados en carreras en 7 de sus últimos 10 juegos, incluso pese a ir 5-5 en la misma racha. Una verdadera paradoja que indica lo inconsistente y desequilibrado que es este club.

Nacionales de Washington: hundimiento progresivo y alarmante

¿Una racha de 11 derrotas consecutivas? Sí. ¿Un récord de 30-44, con 13-33 en juegos donde permiten jonrones? También. El hundimiento de los Washington Nationals en junio es preocupante, incluso para un equipo con pocas expectativas.

Las lesiones han hecho estragos en Washington, con figuras como Josiah Gray, DJ Herz y Dylan Crews confinados a la lista de lesionados. En medio del caos, el proyecto de James Wood continúa brillando con consistencia (.282 AVG, 18 HRs), pero ni siquiera su aporte evita el colapso colectivo de una franquicia en eterna reconstrucción desde su título en 2019.

Orioles de Baltimore: el potencial estancado

Los Orioles siguen siendo un equipo joven y prometedor, pero su récord de 31-42 los pone en una situación incómoda. Su pitcheo ha sido inconsistente, su rotación principal ha sido golpeada con fuerza (Rodriguez, Bradish, Wells, Suarez... todos en la IL), y el equipo parece sobrevivir a base de chispazos ofensivos aislados.

Pese a tener jugadores en rachas importantes como Ryan O’Hearn (.302 AVE) o Ramón Laureano (11-37, 3 HR en los últimos 10 juegos), los Orioles constantemente pierden ventajas y su bullpen es uno de los más erráticos del joven circuito. ¿El punto más desesperante? Son el equipo con más derrotas luego de ir ganando por más de cinco carreras.

Rays vs Orioles: el ejemplo perfecto de polos opuestos

En su última serie, los Rays de Tampa Bay protagonizaron la mayor remontada de la temporada (desde un 0-8) para vencer 12-8 a los Orioles. Esa serie fue más que una anécdota: fue una metáfora. Mientras los Rays con un roster menos estelar aprovechan oportunidades, los Orioles no logran materializar su potencial. El colapso mental y estructural del equipo de Baltimore fue doloroso de ver para sus fanáticos ese día.

New York Yankees: ¿cómo puedes ser líder y estar en crisis?

Con récord de 42-31, los Yankees son aún punteros de su división... y sin embargo, vienen de perder 7 de sus últimos 10 juegos. Tienen problemas graves cuando se trata de generar ofensiva consistente, pese a contar con el mejor bateador de la MLB en lo que respecta a AVG: Aaron Judge (.366, 26 HR, 60 RBI).

¿El problema? Más allá de Judge, la alineación parece perderse en su propio ruido. Cody Bellinger, por ejemplo, apenas batea para .225 con una pobre producción de 1 HR en los últimos 10 juegos. A esto se suman las lesiones de Gerrit Cole, Stroman y Gil, complicando el cuerpo de abridores.

Angels y el espejismo de una reconstrucción

Mientras tanto, los Angels sorprenden ocasionalmente. Con marca de 36-37 y una rotación aceptable, han logrado mantenerse .500, y su ofensiva liderada por Taylor Ward empieza a ser confiable. Aun así, el equipo vive en el limbo entre competir o vender piezas.

El juego contra los Yankees este jueves puede marcar un parteaguas, ya que buscan cerrar la serie con una victoria teniendo a Tyler Anderson en la lomita frente a Carlos Rodón, el as de los Yankees con 3.01 ERA.

¿Qué nos dicen estas historias?

Todos estos equipos se encuentran entre la frustración de sus expectativas y la crudeza de su realidad. Los Rockies no parecen interesados en competir. Los Nationals no pueden sostener ni siquiera lo básico. Los Orioles, repletos de potencial, caen víctimas del desorden gerencial y falta de consistencia mental. Y los Yankees, ejemplo del "todo en el papel pero nada en la realidad", son el mejor reflejo de que los números no siempre cuentan toda la historia.

Quizás lo más trágico e interesante de esta narrativa colectiva es que todos estos equipos tienen algo valioso en su roster. Y sin embargo, ninguno parece estar fluyendo como debería. Es un recordatorio de que el béisbol, por más que se analice con sabermetría, sigue siendo profundamente impredecible y humano. Y en 2024, nadie lo representa mejor que estos cuatro conjuntos.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press