Dolce & Gabbana reinventa el verano con una colección masculina entre pijamas, lujo casual y nostalgia italiana

Moda sin reglas: la elegancia del desaliño calculado

En el siempre esperado desfile de Dolce & Gabbana durante la Milano Fashion Week, la firma italiana presentó su colección masculina primavera-verano 2026 con un claro mensaje: la sofisticación ya no necesita rigidez. Con un enfoque centrado en el "lujo relajado", Domenico Dolce y Stefano Gabbana apostaron por siluetas sueltas, tejidos arrugados y una estética pijama chic que eleva lo cotidiano a un nuevo nivel de elegancia atrevida.

Un desfile que juega con lo cotidiano

El desfile arrancó con un conjunto que resumió toda la colección: pijamas de rayas, deliberadamente arrugados, tanto en versión corta como larga. Las telas, vaporosas y suaves, parecían fundirse con el cuerpo de los modelos, que caminaban al ritmo de una banda sonora clásica: Beethoven, marcando la dualidad entre tradición y transgresión.

"Queremos que el hombre se sienta libre, sin ataduras ni convenciones, pero sin perder su esencia italiana de vestir bien", comentó Stefano Gabbana a la prensa tras bastidores.

Entre la oficina y la playa: moda funcional e híbrida

Esta colección no distingue horarios ni códigos de vestimenta estrictos. Un blazer doble de hombros anchos combinado con pantalones de pijama a rayas rosas resume esa dicotomía entre trabajo y placer, rutina y vacaciones.

• Pantalones estilo pijama con estampados florales bordados
• Cazadoras ligeras de punto crudo con acabado rústico
• Overcoats peludos tipo bata mezclados con shorts de cuero blanco
• Camisas con puños XL que asoman bajo americanas entalladas

Los boxers visibles intencionalmente o las camisas sueltas dan la idea de un vestuario prêt-à-porter sin esfuerzo, pero en realidad está meticulosamente pensado para lograr equilibrio y contraste.

El pijama como ícono de la nueva elegancia masculina

Desde su incorporación al streetwear hasta su entrada triunfal en las pasarelas, el pijama se ha convertido en símbolo de una nueva masculinidad. En palabras de Domenico Dolce:

“El hombre moderno no necesita traje para demostrar quién es. Puede vestirse con seda arrugada y seguir mostrando poder”.

La combinación de una camisa de rayas celeste con shorts de cuero blanco fue uno de los looks más celebrados. “Es la mezcla perfecta entre pijama y safari urbano”, decía Lucien Laviscount, uno de los asistentes célebres en primera fila.

El regreso de los accesorios con nostalgia y toques vintage

D&G no dejó de lado los detalles:

• Broches camafeos usados en pareja sobre camisas o chaquetas
• Sandalias acolchadas tipo slider ideales para la noche costera
• Collares de madera, perlas y textiles artesanales

Estos complementos trajeron un aire de dolce vita-moderna, en la que lo antiguo convive con lo contemporáneo. El uso de bordados florales con pedrería evocó jardines sicilianos de verano, una firma visual que los diseñadores han sabido perpetuar en cada temporada.

Modelos sacando la moda a la calle

Como guiño a la libertad urbana, los modelos salieron del teatro Metropol de Milán al final del desfile y dieron una vuelta completa por la manzana, desfilando para los transeúntes. Esta acción simbolizó el espíritu accesible y envolvente de la colección.

"Queríamos eliminar los muros entre pasarela y calle. Esta ropa está hecha para ser vivida, no solo admirada", afirmó Dolce entre aplausos.

Una crítica contra las convenciones en la moda masculina

Este desfile puede leerse como una crítica velada a la rigidez de la moda masculina aún presente en algunos sectores. Con un enfoque que difumina las líneas entre lo formal y lo informal, Dolce & Gabbana parece decir: ¿por qué no podemos divertirnos también con lo masculino?

Según el historiador de la moda Carlo Capasa, esta tendencia no es nueva, pero gana fuerza en un contexto post-pandemia donde el bienestar y la comodidad han tomado el control del consumo de moda.

“Lo que antes era considerado 'ropa de casa', ahora es símbolo de estatus y rebeldía”, explica Capasa.

Celebridades y calor mediático

La pasarela tuvo como invitados a figuras como Zane Phillips, Theo James, Lucien Laviscount y Michele Morrone. Todos ellos representan arquetipos masculinos diversos, desde el clásico caballero inglés hasta el seductor mediterráneo. Su presencia refuerza la idea de que esta moda no tiene un solo dueño: es para todos los hombres que se animen a cambiar las reglas.

“Me pondría todo lo que acabo de ver”, bromeó Theo James tras finalizar el desfile, mientras decenas de influencers replicaban ya los looks en sus stories e outfits of the day.

¿Una nueva era para el vestir masculino?

La pregunta ahora es si esta visión desenfadada de la elegancia triunfará en el día a día. Los números parecen acompañar: según un reporte de Business of Fashion, las ventas de conjuntos de lino, pijamas de seda y piezas relajadas para hombres crecieron un 23% en 2023 a nivel mundial, y se estima un aumento del 30% para 2025.

Dolce & Gabbana demuestra que la moda masculina ya no necesita armaduras para imponerse. Al contrario, su poder reside ahora en la fluidez, en la naturalidad y en la posibilidad de abrazar contradicciones con estilo.

Y es que el verdadero lujo del siglo XXI no está en el brillo o la ostentación, sino en sentirse bien, verse bien y vivir con autenticidad. Y esta colección, sin duda, es un manifiesto de esa nueva era.