La dramática reestructuración del IRS y los riesgos fiscales que se avecinan en Estados Unidos

Una reducción histórica en la fuerza laboral del IRS

El Servicio de Impuestos Internos (IRS) de Estados Unidos está atravesando una etapa crítica. Según el informe anual de la Defensora Nacional del Contribuyente, Erin M. Collins, en tan solo un año, el ente fiscal ha perdido más de una cuarta parte de su personal. De una fuerza laboral que contaba con 102,113 empleados en 2023, ahora queda apenas 75,702 efectivos.

Esta reducción ha sido impulsada por una combinación de factores. Principalmente, una iniciativa del llamado Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE) propició una salida masiva de empleados mediante un plan de renuncias diferidas. Se calcula que más de 17,500 trabajadores aceptaron la oferta en lugar de enfrentar despidos.

Los departamentos más afectados han sido:

• Servicios al contribuyente
• Oficina de pequeños negocios y trabajadores independientes
• Tecnologías de la información

Una temporada de impuestos en peligro

La temporada de impuestos de 2025 fue considerada por Collins como “una de las más exitosas de los últimos años”, pero advirtió que la situación podría volverse crítica en 2026. Los recortes masivos, el estancamiento en la contratación y los inminentes cambios en la legislación tributaria plantean múltiples riesgos.

"Con la fuerza laboral del IRS reducida en un 26% y cambios significativos en las leyes fiscales en el horizonte, hay riesgos reales para la próxima temporada de impuestos", alertó Collins. Uno de los problemas más apremiantes es que el IRS aún no ha iniciado la contratación y capacitación del personal necesario para hacer frente a la demanda del próximo año.

El nuevo paquete legislativo de Trump y sus implicaciones fiscales

La administración de Donald Trump ha impulsado una propuesta presupuestaria que podría añadir una nueva capa de complejidad. Según el informe, esta legislación contiene cambios retroactivos que afectarían el año fiscal 2025, por lo que el IRS tendría que actualizar formularios y software en tiempo récord.

Una de las disposiciones más controversiales es la prohibición retroactiva sobre los reclamos del Employee Retention Credit presentados después del 31 de enero de 2024. Esto no solo podría resultar en confusión generalizada entre los contribuyentes, sino que también requerirá una reprogramación masiva de los sistemas del IRS.

En años donde han existido cambios relevantes en la ley fiscal, el IRS ha visto aumentos significativos en las llamadas de asistencia que recibe, lo que implica una mayor necesidad de personal de atención y mejores herramientas digitales para evitar colapsos del sistema.

El calvario de los casos de robo de identidad

El IRS también enfrenta una creciente crisis relacionada con el robo de identidad. A fines de la temporada de impuestos de 2025, había aproximadamente 387,000 casos de víctimas que aún esperaban resolución, una mejora marginal si se compara con los 500,000 casos pendientes el año anterior. Sin embargo, los tiempos de atención siguen siendo inaceptables: el promedio actual es de 20 meses, apenas una mejora respecto a los 22 meses del año anterior.

"El tiempo de resolución sigue siendo inaceptablemente largo," subrayó Collins. "Insto a la agencia a que se enfoque en reducir drásticamente el tiempo que toma cerrar estos casos, para que las víctimas no se vean forzadas a esperar casi dos años para recuperar su dinero."

Un futuro incierto para los contribuyentes estadounidenses

El futuro inmediato no augura buenas noticias para los contribuyentes. A los recortes presupuestarios propuestos —una reducción del 20% en el financiamiento del IRS para el próximo año— se suma la eliminación de fondos adicionales previamente asignados por la Ley de Reducción de la Inflación durante la era Biden.

En términos netos, esto representa una contracción presupuestaria del 37%. Y como bien señala el reporte, “una reducción de tal magnitud es probable que impacte directamente a los contribuyentes y posiblemente en la recaudación de ingresos”.

¿Qué dice la historia?

El IRS ha soportado presiones políticas anteriormente, pero la magnitud actual de su debilitamiento no tiene precedentes modernos. Durante los años 1980 bajo Ronald Reagan, se impulsaron iniciativas similares de achicamiento del estado, pero nunca a este ritmo ni con semejante impacto operativo. El IRS ha sido una de las entidades más criticadas por sectores conservadores, quienes han catalogado a la institución como un gigante burocrático ineficiente.

Este enfoque ha ganado terreno dentro del partido Republicano, culminando en esta nueva etapa bajo la administración de Trump.

¿Quién protege al contribuyente?

El papel de la Oficina del Defensor del Contribuyente se vuelve vital en este contexto. Collins y su equipo deben actuar como un nexo entre el IRS y los ciudadanos, pero su capacidad de incidencia es limitada ante un Congreso dividido y una Casa Blanca que impulsa recortes drásticos.

La defensora ha enfatizado que si no se toman medidas inmediatas para recontratar personal, capacitar nuevos empleados y actualizar los sistemas, los problemas del IRS podrían convertirse en un caos fiscal a nivel nacional.

¿Qué pueden hacer los contribuyentes?

Ante este escenario, los expertos ofrecen algunas recomendaciones:

• Planificar con antelación: No esperar al último momento del plazo fiscal para presentar impuestos.
• Actualizar información personal: Especialmente direcciones y métodos de pago.
• Usar herramientas digitales: El portal oficial del IRS ofrece múltiples soluciones virtuales que ayudan a los contribuyentes a autogestionarse sin depender de atención telefónica.
• Documentar todo: Guardar copias de todas las declaraciones, comprobantes y solicitudes.

El informe de Collins es más que una advertencia técnica: es un llamado de emergencia institucional. Si el Congreso y el Ejecutivo no actúan de inmediato, el IRS podría enfrentar un colapso funcional en la próxima temporada de impuestos.

Fuentes consultadas: Informe de la Defensora Nacional del Contribuyente 2025