Montverde y las madres del Draft 2025: Una generación dorada forjada con amor y talento

La histórica camada de Montverde arrasó en el Draft, mientras las madres protagonistas robaron el show en una noche emocional e inolvidable para la NBA

La noche del Draft de la NBA 2025 no solo fue histórica por la calidad de los jugadores seleccionados, sino también por la narrativa emocional que rodeó a cada elección. Si hubo un colegio que se robó los titulares, ese fue la Montverde Academy de Florida. Por segunda vez en su historia, cuatro de sus jugadores fueron elegidos en la primera ronda, todos piezas clave del equipo invicto que dominó el baloncesto escolar estadounidense en 2024. Y si hubo un grupo que se robó el corazón de los aficionados, fueron las madres de estos jóvenes, mujeres fuertes, muchas con experiencia en el deporte, cuyas historias y sacrificios se hicieron visibles en la alfombra dorada del Barclays Center de Nueva York.

Montverde Academy: fábrica de estrellas NBA

La generación 2024 de Montverde Academy pasará a la historia como una de las más dominantes jamás vistas en el baloncesto escolar. Con un récord de 33-0, este equipo no solo ganó todos sus partidos, sino que lo hizo con una autoridad abrumadora: promediaron victorias por 34 puntos, con 30 de sus 33 partidos ganados por doble dígito. Se alzaron con el octavo campeonato nacional de la escuela y culminaron la temporada como el equipo número uno del país.

Los cuatro protagonistas que saltaron al estrellato esa noche fueron:

  • Cooper Flagg - elegido 1° por los Dallas Mavericks
  • Derik Queen - elegido 13° por los Atlanta Hawks (pero traspasado a New Orleans)
  • Asa Newell - elegido 23° por los Pelicans (pero traspasado a Atlanta)
  • Liam McNeeley - elegido 29° por los Phoenix Suns (traspasado a Charlotte)

No era la primera vez que Montverde hacía historia. En el Draft de 2021, cuatro exalumnos también fueron seleccionados en la primera ronda: Cade Cunningham (1°), Scottie Barnes (4°), Moses Moody (14°) y Day'Ron Sharpe (29°). Sin embargo, lo de este año sorprendió al mundo por la cohesión del grupo que venía de arrasar colectivamente una temporada completa antes de llegar a la NBA.

La emoción de las madres: protagonistas silenciosas que brillaron

Mientras los reflectores se enfocaban en los jóvenes promesas, fueron las madres quienes conquistaron el corazón de millones a través de las cámaras de ESPN. Con lágrimas genuinas, abrazos eternos y rostros que reflejaban años de esfuerzo, las progenitoras de estos atletas plasmaron el verdadero significado del Draft: la culminación de un sueño forjado en familia.

Kelly Flagg: una madre campeona

Kelly Flagg no solo es madre del flamante número uno del Draft, Cooper Flagg, sino que también es una exjugadora con historia. En la temporada 1998-99 fue parte del equipo de la Universidad de Maine que logró la primera victoria de un equipo femenino en el March Madness, derrotando a Stanford en uno de los mayores upsets del torneo.

"Solo esperaba que él amara el baloncesto tanto como nosotros lo hemos amado siempre", comentó Kelly entre lágrimas. "Estamos emocionados porque realmente lo disfrutó y llegó hasta este punto. Es increíble".

Maria Harper: madre, entrenadora y mentora

Dylan Harper, seleccionado en el segundo puesto por los San Antonio Spurs, no tardó en correr a abrazar a su madre Maria al oír su nombre. Ella no solo ha sido su guía emocional, sino también su entrenadora desde que jugaba en su primer equipo AAU hasta la secundaria. Además, ella misma jugó baloncesto universitario en la Universidad de New Orleans (1993–1996).

"Para ella ver este momento probablemente significa el mundo. Todo lo que hago es por ella, la amo más que a nada", declaró Dylan al borde de las lágrimas.

Bendra Rolle: de las Bahamas a la NBA

El tercer elegido, VJ Edgecombe, trajo consigo una historia particular: la de una familia de las Bahamas que luchó para alcanzar el sueño americano. Su madre, Bendra Rolle, no contuvo las lágrimas mientras reiteraba: "Bimini para el mundo", celebrando que su hijo lleve el nombre de su pequeña isla al escenario internacional.

Tenneh Sorber: la historia más desgarradora

Thomas Sorber fue seleccionado por el Oklahoma City Thunder, pero la historia que más conmovió fue la de su madre, Tenneh Sorber. Con una bandera de Liberia en sus manos, recordó su escape de la guerra civil en 1999, cuando apenas tenía 28 años.

"Yo soy madre... trabajé para que llegara donde está", dijo con la voz quebrada. Su hijo, visiblemente emocionado, respondió con un sencillo pero poderoso: "Es todo por ti, mamá. Todo por ti".

Un draft con sabor internacional

Además del dominio de Montverde y de las conmovedoras historias familiares, el Draft también destacó por su diversidad. Jugadores de Francia, España, China, Israel y Liberia formaron parte de la primera ronda. El caso de Noa Essengue (Francia), elegido por los Bulls con apenas 18 años, apuntala el papel cada vez más dominante del desarrollo europeo en la NBA moderna.

Por su parte, Hugo González, extremo español de 2.00 metros de estatura y uno de los talentos más prometedores del país ibérico, fue seleccionado por los Boston Celtics en la posición 28. Este movimiento apunta a una apuesta por el desarrollo a largo plazo, mientras Hugo se adapta al sistema NBA y probablemente continúa su formación inicial en Europa antes de cruzar el Atlántico.

El dominio de los jugadores formados fuera de los Estados Unidos continúa en aumento. En los últimos cinco años, tres MVP consecutivos —Giannis Antetokounmpo (Grecia), Nikola Jokić (Serbia) y Joel Embiid (Camerún)— han sido productos internacionales. La tendencia sugiere que el futuro será cada vez más global.

El simbolismo más allá del deporte

Cada Draft de la NBA es una serie de nuevas oportunidades, contratos multimillonarios y el inicio de sueños de gloria. Pero en 2025, fue también una noche de homenaje para esas personas que empujaron estos sueños desde atrás, desde la cancha de tierra de la niñez hasta la tarima más exclusiva del baloncesto global. Fueron mujeres, muchas con historia propia en el deporte, quienes se alzaron como símbolo de lucha, entrega y amor incondicional.

Que Montverde Academy siga siendo la gran cuna de talento es algo digno de aplauso. Pero que el Draft de 2025 haya elevado el rol de las madres a protagonistas emocionales de la noche, es quizás el mejor reflejo del verdadero ADN de un campeón.

Texto de opinión por un seguidor apasionado de la NBA que, como muchos, aún no supera la imagen de Kelly Flagg indicando que su último duelo con su hijo quedó "en pausa".

Con lágrimas, balones y recuerdos, el Draft 2025 ha sido una de las ceremonias más humanas de la historia reciente. Y eso vale más que cualquier triple sobre la chicharra.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press