Lonzo Ball a los Cavaliers: ¿resurrección de una carrera prometedora o apuesta arriesgada?

El traspaso de Lonzo Ball a Cleveland despierta preguntas sobre su estado físico y el futuro inmediato de los Cavs

Una apuesta con historia: Lonzo Ball cambia de aires

Lonzo Ball, alguna vez considerado una de las mayores promesas del basquetbol estadounidense, cambiará una vez más de uniforme tras un turbulento paso por los Chicago Bulls. Los Cleveland Cavaliers han acordado un traspaso con los Bulls para adquirir al base, enviando al joven alero Isaac Okoro en la otra dirección. La información fue filtrada por una fuente con conocimiento de la negociación, aunque el movimiento no se oficializará hasta el inicio del nuevo año fiscal de la NBA, el 6 de julio.

Este traspaso tiene varias capas que explorar: desde el estado físico de Ball tras múltiples cirugías, hasta el impacto posible en la rotación de un equipo de Cleveland que, pese a una temporada regular excelente (64-18), fue eliminado prematuramente en los Playoffs. Aquí analizamos por qué este traspaso podría ser un gran acierto... o una bomba de tiempo.

Lonzo Ball: una carrera prometedora frenada en seco

Desde su entrada a la liga como la segunda selección global del Draft 2017 por los Lakers, Ball ha tenido que cargar con grandes expectativas. Con una visión de juego y capacidad defensiva poco comunes para su edad, parecía destinado a liderar un equipo desde la posición de armador. Sin embargo, las lesiones se convirtieron en un obstáculo constante.

En su carrera con los Bulls, que comenzó en 2021, algo se rompió —literal y metafóricamente hablando—. Ball disputó solo 35 partidos en la temporada 2021-2022 antes de sufrir una lesión en la rodilla izquierda que ha condicionado su rendimiento hasta hoy. Nada menos que tres cirugías (incluyendo un complejo trasplante de menisco y cartílago en marzo de 2023) han sido necesarias para intentar devolverle su forma física.

En la temporada más reciente, logró aparecer en algunos partidos, promediando 7.6 puntos, 3.4 rebotes y 3.3 asistencias. Pero su bajo impacto y una nueva lesión en la muñeca derecha volvieron a ponerlo en el banquillo.

¿Por qué Ball en Cleveland?

La necesidad de un base es real en Cleveland. Con Ty Jerome convertido en agente libre y Darius Garland fuera por cirugía en el dedo gordo del pie, los Cavaliers están cortos de opciones en la posición de armador para el inicio de la próxima temporada.

Sumar a Ball es una jugada que busca llenar ese vacío, pero no se trata solo de cubrir un puesto. Si Lonzo logra mantenerse saludable, presenta un encaje táctico interesante:

  • Excelente visión de pase para encontrar a Donovan Mitchell, Evan Mobley y Jarrett Allen en posiciones ventajosas.
  • Defensa perimetral de élite, promedia 1.5 robos por partido en su carrera.
  • Un base que no necesita dominar el balón constantemente, permitiendo fluidez ofensiva.

Isaac Okoro: víctima del contexto

Por otro lado, el sacrificado en la ecuación fue Isaac Okoro, un jugador de gran capacidad defensiva, pero que no logró consolidarse como parte esencial de los Cavs. Seleccionado como número cinco del Draft en 2020, Okoro fue bajando minutos esta temporada (promedió solo 14.2 minutos en los Playoffs frente a los 19.1 en la temporada regular).

Mientras que en defensa aportaba intensidad, su inconsistencia ofensiva limitó su desarrollo como pieza clave. Sin embargo, en un equipo como Chicago, en plena reconstrucción, podría encontrar el espacio y la paciencia necesarios para evolucionar su juego.

Un traspaso condicionado al futuro físico

El principal aspecto que determina si este traspaso será recordado como un acierto o un fracaso está en una palabra: salud.

Ball recibe un salario de $20.5 millones para la próxima temporada, con una opción de equipo de cara a la 2026-27. Para una franquicia como Cleveland que busca consolidarse como contendiente, ese número es considerable para un jugador cuya disponibilidad es incierta.

Las estadísticas recientes no son alentadoras: jugador que no pisa una cancha en dos temporadas completas, con una operación compleja en la rodilla que pocos atletas han logrado superar con éxito. La medicina deportiva ha evolucionado, pero Ball está aún bajo evaluación médica constante.

¿Quién gana este traspaso?

Desde una perspectiva analítica, tanto los Bulls como los Cavaliers asumen riesgos, aunque los contextos distintos matizan esas apuestas.

  • Cavaliers ganan si: Ball logra jugar al menos 60 partidos y establecerse como el armador titular en un equipo que apunta a las Finales del Este.
  • Bulls ganan si: Okoro se convierte en un "3 and D" confiable y gana desarrollo ofensivo en mayor volumen de juego.

Además, si se contempla la duración del contrato, Okoro tiene dos años de contrato garantizado y es más joven (23 años), mientras que Ball podría convertirse en agente libre al final de la próxima temporada si el equipo no ejerce la opción en su contrato.

Combinación con Donovan Mitchell, clave del experimento

Donovan Mitchell, estrella de Cleveland, necesita un socio adecuado en la parte trasera de la cancha: alguien que le permita jugar fuera del balón, que pueda defender al mejor perímetro rival y que facilite el juego. Lonzo Ball, sobre el papel, reúne esos requisitos.

Recordemos que en la primera etapa de su carrera, en los Pelicans, Ball promedió 14.6 puntos y 5.7 asistencias en su mejor campaña (2020-2021). Si logra recuperar ese nivel físico y de confianza, podríamos estar hablando de uno de los regresos más impactantes de la NBA.

La presión del Este aumenta

Este traspaso también se entiende en el contexto de un Este cada vez más competitivo. Los Celtics, campeones recientes; los Bucks de Giannis; los Knicks al alza... Cleveland necesita consolidarse como un equipo de segunda ronda o más allá. Ya no basta con tener una buena temporada regular: las expectativas ahora están en postemporada.

Ball puede ser ese "factor X" que incline la balanza. O puede ser otro capítulo de promesas incumplidas de la NBA. La moneda está en el aire.

Citas destacadas

"Creo que Lonzo aún no ha escrito su mejor capítulo. Cuando esté saludable, es uno de los mejores bases pasadores de la liga." — Zach Lowe, analista de ESPN.

"Su operación de cartílago fue radical. Si regresa, será un caso médico de estudio y referencia." — Dr. Brian Sutterer, especialista en medicina deportiva.

Lo que viene

La fecha clave ahora es el 6 de julio, cuando se podrá formalizar el traspaso. Mientras tanto, todos los ojos estarán en los entrenamientos de pretemporada y en el desempeño físico de Ball. Es un momento decisivo que definirá no solo su destino, sino en parte el de los Cavaliers.

Los fanáticos de Cleveland tienen razones para ilusionarse, pero también deben mantener los pies en la tierra. En el mundo del deporte profesional, la línea entre el éxito y la decepción es más delgada de lo que parece.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press