¿Se desmoronan los Yankees? El efecto dominó de la lesión de Aaron Judge y más problemas en la MLB

El ocaso temporal de una superestrella: La lesión de Aaron Judge

Aaron Judge, el coloso de los Yankees, ha hecho saltar las alarmas en Nueva York. El toletero estrella fue excluido de la alineación contra los Filis y enviado a realizarse imágenes por una dolencia en el codo derecho. El manager Aaron Boone reconoció la preocupación:

“Obviamente estamos preocupados. Esperamos que sea algo manejable,” dijo Boone sobre su capitán.

Judge, dos veces MVP de la Liga Americana, lidera las Grandes Ligas con un promedio de bateo de .342, OPS de 1.160, 37 cuadrangulares y 85 carreras impulsadas. A falta de una confirmación oficial, el temor gira en torno a un potencial daño en el ligamento colateral cubital (UCL), la temida antesala de una cirugía Tommy John.

Contexto negro para los Yankees

Los Yankees parecían dominar la División Este de la Liga Americana hasta finales de mayo, cuando ostentaban una ventaja de siete juegos. Sin embargo, el sábado iniciaron su jornada a 5 ½ juegos detrás de los líderes Toronto Blue Jays. La pérdida (aunque temporal) de Judge agrava un panorama que ya era preocupante.

La secuencia del daño es clara. Durante un juego en Toronto, después de capturar un elevado de Alejandro Kirk, Judge realizó un fuerte lanzamiento que evidenció dolor inmediato. Fue visto apretando el puño derecho —síntoma casi inequívoco de molestia seria en el brazo de lanzar.

Filis también golpeados: Aaron Nola y una recuperación incierta

Mientras tanto, en la acera de enfrente en ese mismo partido, los Filis de Filadelfia enfrentan sus propios dramas físicos. Su as Aaron Nola está intentando regresar tras una doble lesión: un esguince de tobillo sufrido el 8 de mayo durante ejercicios de agilidad y una fractura de costilla detectada posteriormente mediante resonancia.

Nola iniciará su primera apertura de rehabilitación este jueves con la filial Triple-A Lehigh Valley. Lanzará alrededor de 60 lanzamientos, según el manager Rob Thomson. El jugador de 32 años ha vivido una temporada para el olvido, con marca de 1-7 y una ERA de 6.16 en apenas 49 2/3 entradas. Es su primer paso por la lista de lesionados desde 2017.

Más bajas en Filadelfia: Castellanos y Bohm fuera

Y como si el desastre no fuese suficiente, Nick Castellanos, jardinero derecho de los Filis, también fue sacado de la alineación luego de que se resentiera la rodilla izquierda en una jugada defensiva contra los Yankees. "Vino un poco adolorido hoy, lo mantendremos fuera y veremos cómo está mañana", declaró Thomson.

El antesalista Alec Bohm, por su parte, se recupera de una fractura de costilla tras ser golpeado por una recta de 92.2 mph de Yu Darvish el 12 de julio. Aunque habían intentado su regreso después del All-Star Break, el dolor persistente lo devolvió a la lista de lesionados. Actualmente se le monitorea mientras viaja con el equipo a Chicago.

Los White Sox responden con artillería pesada

En medio de esta ola de malas noticias, los Chicago White Sox ofrecen un refrescante contrapeso. Encabezados por los novatos Edgar Quero y Chase Meidroth, los White Sox le propinaron una aplastante paliza 12-5 a los Chicago Cubs, para su sexta victoria en sus últimos siete partidos.

Quero compiló su primer juego de cuatro hits, mientras Meidroth abrió con un cuadrangular y cosechó tres imparables. Colson Montgomery, Austin Slater y Mike Tauchman también la sacaron del parque, en un festival ofensivo de 18 hits —el mayor número de la temporada para los Sox.

Incluso Miguel Vargas contribuyó con tres hits, y Lenyn Sosa impulsó tres carreras. El abridor Adrian Houser se lució con 6 2/3 entradas de calidad (cinco hits, cero carreras) y logró su cuarta victoria consecutiva. Una bocanada de aire fresco para un equipo en el fondo de la tabla de la Liga Americana Central.

Imanaga, la otra víctima del caos

El zurdo japonés Shota Imanaga sufrió una de sus peores salidas en la MLB. Permitió 12 hits y 7 carreras en poco más de 3 innings de trabajo. Solo había tenido una salida más corta desde que llegó a Grandes Ligas: el 21 de junio de 2024 contra los Mets, cuando permitió 10 carreras en 3 entradas.

Imanaga comenzó la temporada como candidato a Novato del Año, pero ha caído en rendimiento reciente, coincidiendo con la racha descendente de los Cubs, que han perdido 4 de sus últimos 5, quedando a un juego de Milwaukee en la lucha por la cima divisional.

¿Qué nos está diciendo esta semana loca de la MLB?

El béisbol es un deporte largo y cruel. En una misma semana, podemos pasar del optimismo al caos absoluto. Las lesiones de figuras como Judge, Nola, Bohm o Castellanos subrayan una de las verdades inevitables del juego: el cuerpo humano no fue diseñado para el béisbol de alto rendimiento por 162 partidos al año.

Pocas veces en la memoria reciente hemos visto una acumulación tan notable de noticias dramáticas en un fin de semana, justo saliendo del descanso del All-Star:

• El probable MVP de la liga en serio riesgo de perder semanas o meses clave.
• Filis tambaleando mientras sus dos mejores bateadores y lanzadores están fuera.
• Los metafóricamente derrotados White Sox mostrando su mejor cara en un clásico veneziano.

La dura realidad para las estrellas lesionadas

El béisbol moderno está empujando a los cuerpos al límite. Según un estudio publicado en The American Journal of Sports Medicine, el número de lesiones del codo entre lanzadores mayores de 30 años ha aumentado más de un 30% en la última década.

El propio Aaron Judge ya lidiaba con molestias en la muñeca y el oblicuo en años anteriores. Nola ha sido una máquina de durabilidad, pero incluso los más resistentes tienen un límite. La temporada es una maratón, no un sprint, pero ni los mejores cuerpos resisten cuando lo físico y lo mental colapsan.

¿Quién aprovecha el caos?

Con los Yankees heridos, ¿serán los Blue Jays los nuevos favoritos de la Este? ¿Podrán los White Sox reconstruir de cara a 2026 con su generación joven? ¿Podrán los Filis mantenerse a flote mientras esperan el sombrío parte médico de su rotación y linieros ofensivos?

Por ahora, solo queda mirar el diamante y recordar que el drama humano detrás del guante es tan poderoso como cualquier jonrón. Y esta semana, los fanáticos han tenido abundantes razones para salir corriendo por palomitas, esperanza... y algo de paciencia.