Barcelona sobrevive en Butarque gracias a un autogol: ¿suerte de campeón o síntoma de debilidad?

El líder de LaLiga sigue firme en la cima, pero su juego deja dudas tras una victoria sufrida contra el combativo Leganés

Barcelona sigue sumando victorias en su objetivo de cerrar una temporada gloriosa. Este sábado, el conjunto de Hansi Flick logró imponerse por 1-0 en su visita al Estadio Municipal de Butarque, domicilio del CD Leganés, gracias a un desafortunado autogol de Jorge Sáenz. Fue una victoria vital, que mantiene a los azulgranas siete puntos por encima del Real Madrid en la tabla de LaLiga, pero el rendimiento exhibido por el equipo no ha sido el más convincente.

Una victoria engañosa

Aunque los tres puntos se marcharon a la Ciudad Condal, el desarrollo del encuentro dejó abierta la puerta a las dudas. Leganés generó más acciones de peligro, frustró a una delantera del Barça plagada de talento —Lewandowski, Lamine Yamal y Raphinha—, y estuvo cerca de rescatar al menos un empate. De hecho, hasta el propio Flick reconoció tras el partido que "no fue nuestra noche más brillante".

El solitario tanto que definió el encuentro llegó en el minuto 48, cuando Sáenz, en su intento de cortar un pase de Raphinha destinado a Lewandowski, terminó introduciendo el balón en su propio arco. Paradójicamente, la jugada fue creada por Gerard Martín, quien había entrado por un lesionado Alejandro Balde en la primera parte.

El momento de Barcelona

Desde el inicio de 2025, el conjunto culé atraviesa una racha imponente: 24 partidos consecutivos sin conocer la derrota. Además de liderar LaLiga, está en la final de la Copa del Rey, donde enfrentará al Real Madrid en dos semanas, y también ha encaminado su pase a las semifinales de la UEFA Champions League, tras vencer 4-0 en la ida al Borussia Dortmund.

“Estos partidos son los que te hacen ganar ligas”, declaró Éric García tras el encuentro. Y no le falta razón. Ganar en escenarios tan difíciles como el de Leganés, ante equipos que se juegan la permanencia, puede marcar la diferencia al final del campeonato.

Leganés, digno rival

No es nuevo que el modesto conjunto del sur de Madrid le complique la vida al Barça. Ya lo había vencido por la mínima diferencia en la primera vuelta en el Camp Nou. Y en esta ocasión conformó una muralla táctica con una línea defensiva de cinco hombres y contragolpes letales liderados por Daniel Rabaseda.

A pesar de ceder la posesión (67%-33%) y registrar menos remates globales (10 contra 16), las ocasiones más claras fueron locales. Szczęsny, el arquero del Barcelona, evitó el empate en más de una ocasión, y la defensa tuvo que emplearse a fondo, destacando un corte providencial de Íñigo Martínez en los últimos instantes del partido.

¿Síntoma de desgaste o blindaje defensivo?

El triunfo logrado mediante un autogol y algunas intervenciones clave puede ser interpretado desde dos ópticas. Por un lado, la capacidad de sobrevivir en noches difíciles sin brillar es característica de los equipos campeones. Pero, por otro lado, se percibe cierta dependencia del error rival y una dificultad creciente para transformar posesión en goles, lo cual podría pasarle factura en partidos de mayor exigencia.

En esta ocasión, Lewandowski volvió a marcharse sin anotar, Lamine Yamal mostró destellos pero fue bien contenido, y Raphinha tuvo que brillar más en tareas defensivas que ofensivas. La efectividad de este tridente se ha reducido en comparación con sus mejores jornadas.

El estado físico del equipo: ¿alarma por lesiones?

La nota negativa fue la lesión de Alejandro Balde, quien tuvo que abandonar el terreno de juego antes del descanso. Flick prefirió no especular y esperará los resultados médicos para saber si podrá contar con él en la vuelta ante el Dortmund. Su reemplazo, el joven Gerard Martín, rindió a buen nivel, pero la profundidad de plantilla será crucial si el equipo quiere aspirar a ganar el triplete.

Ya son varias las dolencias musculares acumuladas en las últimas semanas, lo cual sugiere un posible desgaste físico, algo lógico en la fase decisiva de la temporada donde se juegan tres competiciones.

Estadísticas reveladoras

  • Barcelona ha ganado 6 de sus últimos 8 partidos por margen de un gol.
  • Sólo ha recibido 3 goles en los últimos 10 encuentros.
  • Ha marcado en cada uno de sus últimos 20 partidos.
  • Lewandowski lleva 2 goles en los últimos 6 partidos.
  • Es la segunda vez en su historia que Barcelona vence a Leganés por la mínima en Butarque.

Un calendario exigente

La hoja de ruta de los culés incluirá una visita a Alemania para terminar su llave de cuartos de Champions ante Dortmund, luego un calendario complicado en LaLiga con rivales como Athletic Club, Betis y, por supuesto, el clásico frente al Real Madrid. Posteriormente, llegará la final de la Copa del Rey, un duelo que podría ser definitorio para consolidar el triplete o romper la racha.

¿Podrá Barcelona mantener el paso firme sin perder frescura ni energías? Si la fortuna de Butarque se repite en otras plazas, es posible. Pero alguien debería recordarles que apoyarse en los errores ajenos no es siempre buena estrategia a largo plazo.

La mirada del rival

La voz del vestuario de Leganés también dejó su análisis. Renato Tapia, uno de los líderes de la zaga local, se lamentó: “Nos vamos con las manos vacías tras haber jugado bien contra un Barça poco efectivo”. Y tiene razón. El equipo madrileño tiene motivos para sentirse orgulloso, aunque también urgido por alejarse de la zona de descenso.

Su calendario venidero no será fácil, pero si mantienen el nivel de intensidad mostrado ante el líder, tienen chances reales de evitar el regreso a Segunda.

¿Y el Real Madrid?

El equipo de Ancelotti jugará su partido contra Alavés el domingo, con la presión extra de haber visto a su eterno rival sumar, aunque sea con lo justo. La carrera por el título continúa, y aunque parezca que el destino está en manos del Barça, aún faltan siete fechas... y un clásico más.

Una cosa está clara: las ligas no se ganan solo con buen fútbol, también se necesitan resultados, suerte y resistencia. Hoy el Barça cumplió. Pero queda camino por recorrer.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press